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Me cogí a mi hijastra en año nuevo
Fecha: 05/12/2021, Categorías: Incesto Tus Relatos Autor: Mystiko, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... para oírnos. Arremeti con mis fuerzas una vez me hube venido dentro de ella, para luego besarla como siempre quise. Ella respondio a mis besos y luego de un par de minutos me fui a mi habitación. El primero de enero al despertar y acordarme de lo que había hecho sentí un gran miedo de que Mia fuera a decirle a su madre. Mi esposa había despertado con una gran cruda y apenas si se movia, la atendí lo mejor que pude y le traje recalentado. Al toparme con Mia quise decirle algo pero no pude, Mia por su parte no me dijo nada tampoco. Al dia siguiente las cosas eran iguales, Mia y yo no nos dirigíamos la palabra y no nos mirábamos, comíamos como “familia” en la mesa pero era incomodo. Para el tres de enero su madre se fue al trabajo y yo volvi a trabajar desde casa, pues en mi trabajo me dieron Home Office por la pandemia. Así que ese día aproveche para ir a hablar con Mia. Fui a su habitación abriendo la puerta con delicadeza, ella estaba en su habitación viendo un video. —¿Qué quieres? —Me pregunto brusca. —Hablar. —Le dije sentándome en su cama. —¿De qué? —Me pregunto aun con brusquedad. —De lo que paso en año nuevo, no estuvo bien lo que hice y sé que una disculpa no enmienda nada. —¿Hablar de como me cogiste y me dejaste de hablar? —Me dijo ofendida. —Si lo sé, lo siento, pero no sabia que decirte y temía que tu madre nos oyera. Tu mas que nadie sabes el oído que ella tiene estando despierta. Mia no me dijo nada, solo siguió viendo su ...
... teléfono. La mire y no podía creer que hacia un par de días ella había sido mi mujer, que la había poseído y el recuerdo me excito. —Yo siento cosas por ti que no debería, pero aun asi no debi haber hecho nada de aquello. —Le dije, Mia hizo su teléfono aun lado y me miro. —¿Y ahora qué? —Me pregunto. Yo no tenia respuesta a aquello, pero de alguna manera sabia lo que pasaría. Me acerque a ella y la bese, ella me correspondió el beso. Mientras nos besábamos pase mis manos por sus pechos y al sentir como ella se acomodaba supe que estaba dispuesta. Le quite su camiseta y vi a la luz del dia esos pechos enormes con sus pezones firmes y duros. Se los chupe sacando de ella unos suspiros. Luego baje por su estomago hasta llegar a sus shorts, se los quite con presteza y vi la conchita que me había cogido hace dos noches. Estaba rasuradita, algo humedecida y se miraba tan apretadita como la recordaba. Comencé a lamerla disfrutando de su sabor, sacándole más jugos que gustoso me bebía. Mia gemia dando en ocasiones gemidos demasiados fuertes, ella era de las ruidosas pensé y no era que me quejara, me gustaba pero sabiando aquello sabia que no podría cogérmela en las noches cuando mi esposa estuviera en casa. Despues de dejarle la concha rebosando de sus propios liquidos, me quite la ropa y saque mi verga, Mia la comenzó a chupar torpemente. Pero no me importo, me gustaba ver su cara al fin chupándomela como había soñado tantas veces. Al cabo de un par de mordiditas ...