Mi compañero de piso Álvaro se corre en mi boca II - Relatos Eróticos

Mi compañero de piso Álvaro se corre en mi boca II

Esta es la continuación de la primera parte de esta historia. Para leerla, accedan a través de este link: https://relatoseroticos-club.com/92226_mi-companero-de-piso-alvaro-se-corre-en-mi-boca

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Habían pasado ya varios días desde que Álvaro se corrió en mi boca. El no parecía tener ningún problema con compartir habitación conmigo y de hecho parecía gustarle. De vez en cuando me hacía bromas sobre cómo mamaba de bien. 

El día después de correrse en mi boca. Me desperté y me lo encontré saliendo de la ducha. Me miró con una sonrisa coqueta y me dijo "te gusto lo que te di de comer ayer eh? Quizás te lo dé más veces". 

Ocasionalmente me da alguna palmada en el culo. Sigo viéndole como un amigo, aunque me ponga cachondísimo pensar en su polla. El parece verlo de la misma manera. De hecho, dos días después de follarme la cara, se trajo a una tía a la habitación. debían de pensar que yo estaba dormido porque se la folló bien. Lo oí desde la litera de abajo, (y lo oí). Luego además me lo contó en detalle a mí y a otro amigo en privado. Habló de su coño, y como restregó su polla por entre sus piernas. Me habló de como ella se la mamaba.

No sé si me sentí envidioso en ese momento. La verdad es que no se lo que sentí. Los dos condones que usó esa noche se habían quedado en el suelo de la habitación. Dos dos llenos de corridas suyas. Le dije que los tirarse al día siguiente, pero él se rió y dijo que ya lo haría. Entre los dos condones, ropa sucia sudada suya se ...

... acumulaba. El lo tiraba desde la cama de arriba. Y solían caer en ese mismo montón. Un día, lanzó unos boxers mientras yo me levantaba de la cama. Fue en mal momento, porque me cayeron en la cara. Él venía del gimnasio y el sudor lo hacía evidente.

Un día, mientras me cambiaba en la habitación, el se acercó a mí por detrás, y con ninguna preocupación, pasó su pene erecto por entre mis nalgas. Salté hacia delante. Me giré y le vía riéndose. "Lo siento tío, es que eso se lo hago al coño de las tías y me pone mucho. Y he visto tu culito y... Pues tienes buen culo tío".

Yo le miré de pies a cabeza. La verdad es que había pensando en cómo sería si el me follase. El olor de sudor de su montón de ropa me ponía cachondísimo. Y aunque el no lo supiera, una noche mientras me masturbaba, agarré ese boxer sudado y lo olí mientras pensaba en como sería. Así que le pregunté " que quieres decir con eso"?

El se volvió a reír. "Nada tío. Sólo que tienes buen culo, puedo volver a verlo". Aunque sabía que era mala opción, me di la vuelta y se lo enseñé. De hecho, no sé porque, pero me incliné hacia abajo, mara que lo viese mejor.

"En ningún momento te he dicho que hagas eso eh", se rió. Me puso las manos en la espalda par que no subiese y apretó su polla contra mi ano. "Te van los tíos no? Alguna vez te han follado"?

Primero no respondí, pero me agarró de la cintura y me apretó contra el. No se porque eso me hizo confesarle que si. " Si Álvaro. Y me gustó mucho".

" Te gusta que los ...