Jose Mari - Relatos Eróticos

Jose Mari

... pudorosa.
-	Si, deja a Jose Mari.
Así que Ana separó sus piernas y se acercó.
Puse un dedo de la otra mano en el centro y traté de hundirlo.
-	Ay, no tan brusco 
-	Deja yo la mojo con mi saliva. Me tomó la mano, chupo mis dedos y ella misma se los puso en donde era.
- 	Aquí!
- 	Aquí? Dije yo y hundí un poquito mi índice.
- Si, Ahí, Ahí, despacito.
Mi mama también me habia cogido la otra mano y como habia soltado el agua, su concha se veía más claramente.
-	¡Mira así! Así se hace. Y tomó mi muñeca entre su mano la subia de abajo a arriba como si estuviera llevando el compás con una guitarra. Esto lo habia aprendido en las clases de guitarra que mi mama me obligaba a tomar.
-	¿Y mira de dónde? Si sabes tocar esa pieza muy bien.
Mi madre sonreía con ojos entrecerrados y mi hermana dijo
-	Es verdad, toca bonito mi hermano. Me hace sentir bonito ahí abajo. Dale Jose Mari guapote.
Mi hermana fue la primera en darse cuenta
-	Mama mira el pito de José Mari se puso duró y paradito.
-	¡Qué dices! ¡Pues es verdad! Es un pito bello. Párate y acércate.
Me pare para que mamá lo viera ...

... bien y en efecto estaba duro. Lo tomo con dos dedos y sentí un corrientazo.
-	Mira José Mari así se pela para limpiarlo.
Con cuidado corrió la piel y dijo:
-	Por hoy te lo voy a limpiar con la boca.
Cogiéndome por la nalgas me empujo hacia ella y sentí que con sus labios me succionaba y que su lengua revoloteaba alrededor de la cabeza.
Con la otra mano se seguía tocando una serenata en su raja y mi hermana con los ojos abiertos como platos para no perder detalle se daba en su boquita con mis dedos.
-	¿Mama que se siente? José Mari y tú?
Mama solo decía Uhm
-	Se siente riquisimo Anita
-	Dale, Joselito, yo también siento rico.
Mi hermana sostenía mi mano apretada contra su rajita y yo movía el dedo indicé y medio y con el pulgar le daba a la lengüita.
- José algo me está pasando. Que es mamá.
Mamá sin dejar de chupar seguía con sus dedos entrando y saliendo y se sentía un chapotear que salía de su raja.
¡Uhm! Hum. Mama ahora chupaba más fuerte y con la lengua más rápido. Iiihmm
-	Mama, mama, mamma. Ahh.
-	¿Ay mama que me pasa? Josee, Joselito. Y empezamos a convulsionar los tres.