esta suegra mia - Relatos Eróticos

esta suegra mia

Esta suegra mía Esta es una corta historia de un pasaje interesante de mi vida sexual, ocurre que estaba de novio con una chica de mi edad, en ese entonces 19 años y como es natural cogíamos cuantas veces y en cuanto lugar podíamos. Ella es cajera en un super y yo ayudo en un reparto, a veces nos pasamos del horario y junto horas, que serian extras que no nos pagan entonces las canjeamos por días franco. El departamento donde vive mi novia con su mama es de solo dos ambientes y justo en el dormitorio había humedad, le arreglaron el techo y ya restaba seco pero quedo manchado, yo me ofrecí a pintarlo en algunos días libres aprovechando que tenia algunos a favor. La mama de mi novia es una gorda petisa no más de 1,50, tetuda, panzona y culona, de cara no es fea, pero para esa época no me tragaba y la calentaba a la hija para que me dejara, por mujeriego, cosa que chismeó en el barrio por algunas cositas ocurridas con hijas de sus amigotas. Comencé una mañana el trabajo, mi novia en el súper así que yo estaba solo con la vieja, movimos las camas al comedor para hacer lugar, y de repente la vieja se queda torcida sobre una de las camas con el culo para arriba y gritando que le había dado un calambre. Le digo que pasa, es que no me puedo mover quede torcida mi cintura y se quejaba, yo no sabía qué hacer, le digo donde me indica la cintura en la espalda, la friego y me dice pásame árnica, que es eso, me dice un gel esta en un pomo en el botiquín tráelo pásamelo. Lo traigo, pensé ...

... bueno veamos, le levanto el batón hasta sobre la cintura y veo su bombacha blanca gigantesca, pensé que culo tremendo tiene, me dice frótame, comienzo en la cintura sobre el elástico de la bombacha, me dice un poco más abajo, le bajo la bombacha hasta la mitad de la zanja y la froto, bastante tiempo y seguía quejándose, me dice a ver ayúdame a ver si puedo incorporarme, no podía grita del dolor, pensé en llamar a una ambulancia, se lo digo y me dice estas loco sigue frotando. Ante la vista de ese culazo, le bajo la bombacha y se lo dejo al descubierto, que culo inmenso y que raja profunda, mi pito reacciona y se comienza a parar, la calidez y suavidad de la piel los movimientos que cada vez los llevaba mas hacia su raja me la paran totalmente. El jean parece querer reventar y creo que agachada como estaba lo vio. Sigo frotando y me dice sabes ya me alivio, no sé si por los masajes o por lo que vislumbro. Trágame tierra, eso no lo esperaba y me dice a ver ahora si puedo, la levanto y se incorpora, con el batón en la panza y las bombachas caídas hasta sus tobillos, dejando ver debajo del pliegue de su barriga una pelambre negra también muy amplia. Me dijo, mira como estoy, me quedo como un idiota, y mira como estas, bajo la vista y veo su mano pasándomela por sobre el pantalón. Ahora el que se tira sobre la cama pero de espaldas soy yo, ella me desabrocha y se prende a chupármela tan bien y suavemente que me viene le aviso y no me da bola sigue y le lleno la boca, continua, ...