YO PRIMERIZO EN ESTO, EL MARIDO CONSENTIDOR ELLA SUMISA - Relatos Eróticos

YO PRIMERIZO EN ESTO, EL MARIDO CONSENTIDOR ELLA SUMISA

... cogi mi polla se la pase una y otra vez por su vulva, sin metersela ella intentaba meterse mi polla y yo se lo impedía, al percatarme que se calentaba mas y mas con aquello, hasta que le metí mi polla, al instante ella empezó a culear a gemir él se puso frente a ella. pense que se la iba a chupar de nuevo pero no, se escurrió hasta quedar debajo de ella como un 69, comenzo a chupar mis huevos su coño, sin yo dejarla de follar, paré sacandole mi polla, la tenia a ella a puntito, en ascuas cuando él se tragó mi polla, la chupó se la sacó y la metió en el coño de ella, empece de nuevo a follarla, a la vez él la chupaba ella se agitaba de forma sobrenatural, gritaba, su coño empezó de nuevo a correrse a dar espasmos de placer, hasta que quedó quieta, sacandose ella esta vez mi polla, aún me quedaba a mi bastante aguante, ademas de que podía echarle un tercer polvo, habiendo un pequeño descanso, ahora estaba yo en mi salsa. Ella se apartó, buscó las bragas, se las puso, me dijo dejame descansar un poco, él tambien se arregló, busqué mi calzón y cuando me lo estaba colocando apareció los faros de un coche, ella ...

... estaba dentró del coche aunque en bragas y sujetador, él corrio a entrar en el coche yo al verlo tambien al mio, sentí como era alumbrado por el coche entrando en mi coche, aparcaron y entonces ellos arrancaron saliendo de alli, yo hice lo mismo, iba a unos 50 metros de ellos, saliendo pararon el coche yo paré a su lado él bajo la ventana, me dijo que saliera y me acercara, lo hice, me dió su numero de telefono, me dijo que lo llamara mañana que hablariamos con tranquilidad, se marcharon, dejandome así. Hable por wasat con él, por la mañana, vi que me estaba interrogando mas que charlando, queria saber si era casado como era mi vida, le conté todo, él tenia 54 años ella 50 años, eran pareja hacia 12 años, aunque tenian hijos de sus anteriores matrionios, me invitaron a merendar a un bar, cerca de su casa, esa tarde, al final terminamos en su casa hasta casi la madrugada, enseñandome él a ser dominante sobretodo con ella, a azotar sus nalgas, como a ella le gustaba, a follarla y a él a actuar de marido consentidor y criado, pues esta es la aventura que estoy viviendo en estos momentos, ojala no se acabe nunca.