Mi tia - Relatos Eróticos

Mi tia

... a besar como novios primerizos, me latia el corazon a 1000 porque empece a tener una ereccion, empece a bajar mis manos a su cintura y enseguida a sus enormes gluteos, ella como toda una mujer madura empezo a excitarse, dejo que le tocara las nalgas y sus piernas.
Puse mi mano derecha en su pecho y por primera vez toque su seno, ella me pregunto que si ya habia estado con alguna mujer y yo le conteste la verdad que no. En ese momento me dijo lo que tantas veces soñe con ella, yo te voy a enseñar y sere tu primera mujer, me empezo a decir como besar mejor, me hizo que le quitara la playera, ella se quito el brassier y por primera vez vi en vivo y a todo color unos senos hermosos, blancos y con un peson bien duro, me avalance sobre ella y empece a mamarle los pechos que estaban tan duros y calientes, mi lengua estaba en el cielo probando sus pezones, me dijo que me quitara la ropa y ella se empezo a quitar la licra con la que se dormia, wow que nalgas, que piernas, traia un calzon de encaje que poco a poco se quito porque no se lo podia bajar de tan inmensas que tenia las nalgas, con mis manos temblorosas empece a tocar ese culo de infarto en lo que seguia como bebe recien nacido, ella bajo su mano y toco mi pene, inexperto, primerizo, pero bien duro que lo tenia, en ese momento aun estaba en su etapa de crecimiento pero eran suficientes los 14 cm que tenia, me dijo que me acostara y en eso ella se subio, como jinete se acomodo en mi vientre, agarro mi pene y lo guio hasta su ...

... avertura, me senti en el cielo cuando senti la piel de sus adentros, se sentia tan delicioso, humedo, caliente, suave, apretado, no sabia que hacer yo con semejante mujeron, si agarrarle las nalgas, las piernas, los pechos , las caderas, si besarla no se me estaba volviendo loco mientras ella empezaba a bombear, eran muy silenciosos sus gemidos pero su cara lo decia todo, lo estaba gozando, se bajo y me dijo que le levantara las piernas, ella misma las puso en mis hombros, y me dijo que le empujara mi verga, yo no dejaba de verle su hermosa vagina, se veia tan deliciosa que no tarde en meterle mi verga y con mis dos manos le agarre el culo y avente todo mi peso para adelante, yo ya me habia convertido en una bestia deseoso de hacer gozar a mi ahora mujer.
Habian pasado unos 10 minutos cuando quizo cambiarse de posicion, se puso de perrito, yo admire en todo su esplendor el tremendo culazo que tenia, lo bese, lo mordi, lo agarre, no podia creer que yo tenia en mis manos toda esa carne y no quise dejar pasar el momento por si llegaba a no volver a tenerlo, ella me dijo ya deja de verme, cogeme que es lo oque quiero, me acerque a sus enormes nalgas, las abri como a un libro y le meti mi pene, ella empezo a mover las caderas y hacerse de adelante hacia atras puesto que estaba inmovil por lo inexperto que estaba en ese momento, despues de unos minutos de estarla cogiendo senti que estaba apunto de explotar y le dije ; tia ya se me va a salir la leche, ella inmediamente me saco y ...