Mi cuñada se deja - Relatos Eróticos

Mi cuñada se deja

... introducir bien mis manos en su costado. Pasé a la parte de los riñones y baje su short dejando su culo desnudo. Ella me decía que no pero no ofrecía resistencia con lo que yo continúe masajeando su culo. Comenzó a gemir poco a poco y abría las piernas dejando ver si coñito depilado y húmedo. Yo empalmadisimo decidí decirla que estaba apunto de terminar y que quedaba lo mejor. Ella me dijo... No pares cuñado, que me estás dejando nueva. Yo apoyé mis dos manos en su culo y me acerqué a su oído diciéndola que se relajara que quedaba lo mejor.

La empecé a besar el cuello, la espalda, el costado y acabando en su precioso culo. Ella no decía nada y comencé a agarrarlo fuerte y lamerlo como si del de mi novia se tratara. Baje mi boxer y subí de nuevo a besar su cuello metiendo mi pene bien duro entre sus piernas rizando si coñito empapado. Ella gimió y me dijo que qué hacía entre gemidos, la contesté que así eran los masajes y que si no, no se iba a quedar agusto. Introduje mi pene en su coñito mientras acariciarla su culo y ella lo levantaba suavemente. La metí entera de un ...

... golpe debido a lo mojada que estaba, se puso a cuatro patas diciéndome que llevaba esperando eso mucho tiempo. La cogí del pelo y la dije que iba a ser una semana llena de sexo a lo que ella me suplicó diciendo que quería ser mi putita esa semana. Después de 5 minutos follamdola duro me dijo que me tubara, que me había ganado un premio. El cual era chuparmela, con esos labios tan carnosos y esa cara de niña buena que se estaba convirtiendo en una fiera. No podía creerlo mi cuñada estaba chupándomela como nunca antes me habían hecho, mientras metía los dedos un su coñito ella aceleraba la chupada. La senté en mi cara y comencé a comérselo como hacía ella, hasta que hice que estuviera a punto de correrse, la puse de rodillas frente la cama y yo sentado en ella mientras seguía chupándomela y se tocaba ella. En ese momento me vine en su boca y dejó caer el semen por sus pechos mientras tenía espasmos por correrse ella también.

Fuimos al baño y me restregó el culo por la polla pidiendo la revancha y me dijo... Mañana me vas a follar más y más fuerte. Pero eso os lo contaré otro día.