1. La quiltra


    Fecha: 09/08/2018, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... tres días tuvo que humillarse pidiendo perdón de rodillas y rogando por pico y aquí está... mamando del pico que despreció y hoy la tiene caliente y loquita, la hago venir a un hotel parejero en un barrio marginal, de mini falda que deja ver las pesas que le cuelgan de la concha y casi el culo, una blusa escotadísima de puta transparente, llega se inscribe como Tania Dirtyhot, paga por un día la habitación y me espera lista, la caliento hasta que llora de deseo de culear y a veces le doy pico de inmediato, otras debe meterse consoladores y masturbarse para mí en el suelo como perra que es, ahí considero si se lo meto o no, bueno igual me pone al tope verla así.
    
    El chico le dejó de tarea perforarse los pezones y ponerse argollas que le dejó compradas, así que eso se lo voy a hacer personalmente en la cabaña que está acondicionada de nuevo.
    
    Ella tiene claro que solo puede ser mi perra sumisa escondida, mi mujer para mí es todo.
    
    "Aaaah que rico estoy acabando en su hocico, permiso"
    
    Parte II y final
    
    Estamos en la cabaña, hoy va recordar todo su castigo, enculada y cabalgando va a ver dos DVD, uno el castigo mío, otro el de mi prima cuando la pilló con su marido, el primer amo que tuvo.
    
    Será en estos días que le voy a tatuar mi sello en los labios internos de su concha, eso lo hará mi prima con gran gusto pues sabe que la perra tiene un viejo tatuaje en el pubis que le hizo Sergio y quiere borrarlo con otro dibujo, el chico se fue por quince días y le contó a su ...
    ... quiltra que iba con su amante, incluso le mostró fotos de ella en pelotas. La quiltra lloró un poco pero como su dueño le dijo que no la iba a largar, se calmó, creo que ella ya sabía que iba a ser mía.
    
    Hace meses terminó el tratamiento y el doctor me dijo que ya ella tenía el control de su mente, así que era mi sumisa por real deseo, la pruebo diciendo que es la última vez que la culeo y se pone abrazada a mis piernas a rogarme que no la bote, ¡quién lo diría!
    
    Cuento corto volvió a gritar como cerda en el matadero con el anillado de las tetas y con los tatuajes. En el pubis quedó un bello pico grueso y cabezón hacia su concha con un chorro cayendo, este va a tener que cuidarse pues lo hizo más doloroso y sangró bastante pues llegó profundo para que quedara en relieve, le dió una crema para que usara y debía mantenerlo limpio, en una semana se caerían las costritas y se podría tocar, y en los labios internos en uno "Soy sumisa de..." y en el otro mi nombre y apellido que no es corto; más aullidos y lamentos cuando se vió en manos de mi prima, le suplicaba que no la castigara más, que ella solo obedecía órdenes de su amo de entonces, quiso escapar y se llevó un castigo a latigazos en su culo y espalda propinados por mi prima que la odia.
    
    Cuando el chico volvió se puso recontento que su quiltra hubiese borrado el tatuaje antiguo y se hiciera su pico que se podía sentir al ser en relieve.
    
    La culeo por sus dos hoyos con mis manos cuando estoy cansado y en reposo del ...