Liberado al fin. - Relatos Eróticos

Liberado al fin.

... quejarme, cuando pude verlo era increíble
Era un tipo sacado, desquiciado, roja su cara y su pecho peludo, la mirada perdida, un hilo de baba que le caía de la boca y su pija que me golpeaba por dentro el cerebro.
Sentí el calor, el dolor, su grito de triunfo, sus manos que lastimaban mis flancos por lo fuerte de sus dedos y su verga lanzando su leche caliente mientras el solo aumentaba el ritmo dándome la.cojida que no hubiera podido imaginar siquiera.
Me la enterró más hondo aún mientras volvía a gritar con sus ojos cerrados y su cabeza tirada hacia atrás como en aullido de animal
Me dolió distinto, la cantidad de leche que tenía adentro calmaba mi ardor, y volví a acabar sin tocarme
A cada chorro que me salió, le seguía un espasmo del culo que me hacía sentir más placer y volver a escupir más de mi acabada
Así estuve un tiempo que no puedo decir hasta que me aflojé y quedé pegado su pija que tenía todavía en el culo. Me sostenía aún con sus manos
Cuando me soltó, después de besarme en la boca, caí pedo muerto en la cama sin un solo músculo que reaccione, y sintiendo un vacío ...

... muy grande en el culo al salirse esa verga
Me puse de lado, abracé mis piernas y me quedé sin mover nada tratando de recuperar alguna voluntad, mientras se fue a lavar al baño
Me había entredormido cuando escuché
- No me imaginé jamás que te la ibas a aguantar. Muchas veces me tengo que conformar con chupada o pajas, me dicen que no aguantan, pero vos te la comiste toda
- Me rompiste todo .. nada sano quedó
- Si, aseguró, ví que te salió algo de sangre pero no pude parar. Me calentaste mucho
- A ver, dije, buscando con la vista eso que me había comido
- Ahora está caída, me sacaste toda la leche
Miré y Vi una pija colgando de unos 15 cms con la cabeza afuera y de 6 Cms de ancho.
Creo que me había comido el doble de lo que veía o por lo menos eso sentía
Se fue. Yo me cambié, me puse cremas cicatrizante.
Me llevó una semana dejar de tener molestias y la sensación de semejante cojida me duró por buen tiempo.
Me había podido mostrar como la puta que soy, me había liberado.
Me había dado la primer cojida alguien que apenas conocía. Me sentía feliz de haber sido mujer y no solo puto