Mi sirvienta Juanita, la complaciente
Fecha: 12/07/2022,
Categorías:
Infidelidad
Tus Relatos
Autor: yavaloc, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
Hola a todos, me dicen Mike, tengo 32 años, 7 de casado, un hijo. Durante la pandemia, llegó a trabajar a la casa Juanita, de 26 años, casada, dos hijos, pero la guarra esta muy buena, tiene dos buenas nalgas y culo redondo, sus tetas tampoco estan despreciables, llegó buscando trabajo por la recesión que generó el Covid, su esposo consiguió trabajo pero lejos de allí, por eso solo llegaba los fines de semana. Juanita vivía con nosotros de lunes a sábado, ese día se iba a su casa. En mi caso tengo una oficina de trámites legales y también cerramos parcialmente, solo trabajamos ciertos días a ciertas horas.
Desde que llegó Juanita le llevaba ganas a sus lindas nalgas, mi esposa siempre estaba atenta, pero no podía hacerlo todo el tiempo. Un día encontré llorando a Juanita y me confesó que a su esposo lo habían mandado más lejos en el trabajo y que ahora vendría cada quince días o tres semanas. Yo la abracé y le dije que no tuviera pena, que todo se iba a componer, y si no yo estaba allí para darle lo que su marido no puede en este momento, le acaricie la espalda y ella me dijo -ay no patrón, qué esta pensando usted, si yo soy decente-. Bueno así quedó. Pero yo un día sábado, ella iba a ir a su casa, le pedí que hiciera la limpieza de las oficinas que le daría un dinero extra, en ese fin de semana su esposo no llegaría, así que no perdería nada. Me dijo que estaba bien, -voy a preparar mis cosas-. Entonces le dije, -Juanita, me encantaría que llevaras aquella ...
... faldita blanca pegada que llevabas hace dos semanas-, ella se sonrió conmigo y me dio -ayy no patrón, lo que me pide-.
La esperé afuera, mi esposa no estaba, cuando la ví, Juanita se había puesto la faldita pegada blanca que me encantaba, sus nalgas redondas se pegaban como segunda piel, se miraba rica Juanita. La llevé en mi auto a la oficina. Entramos, la oficina estaba desierta, algo sucia, porque no se usaba frecuentemente por la pandemia. Juanita empezó a limpiar, y yo no perdía visual cuando se agachaba, su falda era tan cortita que en varias ocasiones le vi la braguita pegada a su rajita. Yo estaba sentado en el escritorio principal haciendo como si ordenaba los papeles, pero lo que hacía era frotarme la verga, ya la tenía bien parada. En una de esas, Juanita se agacha y se pone de rodillas para limpiar una mesita baja, que quedaba frente a mi, pude ver como su rajita se dibujaba en su braguita, no pude más, me fui acercando sin hacer ruido y le tome con ambas manos su redondo trasero, le dije -Juanita, hace semanas que me tienes sin dormir, estas muy buena y yo ando con ganas-, ella no se movió, se quedó en la misma posición viendo como le acariciaba el trasero - ay no patrón, que va a decir la patrona, y recuerde que tengo marido- me respondió ella. -Mira Juanita, nadie debe saberlo, solo los dos-, diciendo eso y le levanté la falda, a pesar de sus dos hijos Juanita estaba muy buena, le di una lluvia de besos y chupadas a sus nalgas, ella solo repetía -no don ...