Fotografias - Relatos Eróticos

Fotografias

... trabajo la encontraba toda sudada y con ese extraño olor y ahora me doy cuenta que era olor a semen y sacando cálculos comenzó en esa semana que conoció al viejo negro aquel domingo, ¿cómo la cambiaron? Muchas dudas que tenía que aclarar.

Luego de tremendas culeadas y como la zorra de la Vivi se abría como si fuera de goma pararon un momento luego de otra carga de semen en la boca y zorra de ella, en eso la Vivi les pregunta si tenían sed y les sirve cerveza la misma que yo compre para mí la muy puta.

Luego de una conversa y como yo era nada en la cama en comparación de ellos según la Vivi y que ella disfrutaba como nunca ser culeada y para que eran esas fotos, para mi gran sorpresa a un que ya nada me podía sorprender más las fotos eran para mí como castigo y de despedida.

¿Castigo de qué? Pensé yo si nunca he peleado con ella ni una discusión ni jamás mire a otra mujer, pero era mi castigo según ella, la Vivi decía que todo cornudo merecía un castigo y mi castigo era ver las fotografías donde salía ella siendo culeada, sodomizada y llena de semen por todas partes, mi castigo era ver como ella se iba con los negros y se convertía en su esclava sexual de ellos y sus amigos, mi gran castigo.

Ya después de esa amena charla de ellos se dirigen al baño todos y por supuesto la Vivi que era la estrella principal de la orgia en mi propia casa, la Vivi se pone en la tina y de rodillas abriendo ...

... la boca para luego uno se acerca poniendo cerca su verga y lanzando un chorro de orina en su boca y salió otra foto más, la orina se botaba de su boca y tragaba todo lo que podía, cada uno le tiro su meado en su cara para luego secarlas con su lengua.

Luego limpiaron el baño y se ducharon juntos no sin antes enjabonar cada miembro, paso el día y ya faltaba poco para tener que regresar a mi casa, la Vivi imprimió las fotos y las dejó en un sobre y en el puso “querido” luego saco toda su ropa y la metió en un bolso y el negro mayor le lleva el bolso a su casa, luego se va junto a ellos con su risa chillona típica para ser la esclava sexual de todos, mi esposa Viviana.

Estaba a punto de llegar a mi casa y veo que por la ventada de ellos se asoma la Vivi y yo como que no le veo me hice el tonto y entre a mi casa, el olor a sexo era fuerte, había manchas de semen en todas partes, en el piso había un calzón de la Vivi lleno de semen, se sentía una mezcla de olor entre vagina, pene y semen y un profundo asco me tuve que ir y no quise ver las fotos y las quemé, pero quedo una donde uno de ellos la culeaba en nuestra cama.

Me separe de ella, mi matrimonio duró unos meses cuando pensé que duraría para toda la vida, pero ella nunca se presentó a los papeles ni a nada, vendí la casa y por supuesto ella no recibió nada y lo único que supe es que ella seguía como esclava sexual de ellos y muchos otros más.