Después de mi divorcio me volví puta 2da parte - Relatos Eróticos

Después de mi divorcio me volví puta 2da parte

... propuesta, ambos acordamos que solo sería una aventura y después nos olvidariamos de esa noche, así que decidí esperarlo con la ropa que traía, solo era una tanga de encaje negra, un vestido de olanes con estampados sin Bra y con poco maquillaje, una hora después tocaron a mi puerta y cuando abrí casi me voy de espaldas pues Dámaso venía vestido con su uniforme militar y se miraba extremadamente guapo, el era más alto que yo y con pulcritud y ese porte de autoridad hizo que me diera un vuelco el corazon, las presentaciones fuero escuetas y de inmediato me abrazo por la cintura y me atrajo hacia él para besarme en los labios, yo me tuve que parar de puntitas para besarlo mientras el me apretaba con fuerza, en seguida nos fuimos a la recamara y el se sentó en el borde de la cama mientras yo me quedé parada frente a el, me incline un poco para besarlo mientras el recorría mis piernas con ambas mano asta llegar a mis desnudas nalgas y continúo subiendo asta alcanzar el elástico de mi tanga en mi cintura, eso pareció encenderlo aún más porque a pesar de que nuestra bocas estaban fundidas en un beso en soltó un resoplido de lujuria y masajeo con más fuerza mis nalgas, el contacto de aquellas ásperas manos con la tersa piel de mis nalgas me hacía perder la razón, en seguida nos separamos un poco y el bajo mi vestido de la parte del pecho y comenzó a besar y después chupar mis pequeños pechos, era la primera vez que un hombre chupaba mis pechos y el placer era indescriptible, yo le ...

... volvía loca de pasión mientras revolvía su pelo deshaciendo su perfecto peinado, después de un rato me puse de rodillas en el suelo en medio de sus piernas mientras el se bajaba el pantalón y el boxer dejando expuesta una verga mucho más grande que la de Don Memo, con unos testículos perfectamente bien depilados y llenos de semen para mí, de inmediato los empecé a besar y a chupar mientras masajeaba su pene, después fui subiendo con mi lengua asta la puntita de su pene de la cual salía una gotita de líquido seminal, la cual recogí con la lengua y saboree en mi boca antes de engullir aquella cabeza brillante y desaparecer casi asta la mitad aquella verga con mi boca, me estuve deleitando con aquel miembro por varios minutos mientras Dámaso me decía; que rico mamás pinche putita!!! Aquellas palabras de ese militar y el estar ahí como una zorra de rodillas complaciendo a un hombre, lejos de sentirme humillada me hacían sentir orgullosa, poco a poco me estaba convirtiendo en una travesti puta y me encantaba, después de un rato Dámaso me puso de pie y me hizo que me montará en el de frente así en esa posición en la que el estaba, el mismo guío su pene a la entrada de mi cuerpo y con la otra mano hacia de lado mi tanga mientras yo me aferraba con ambas manos de su nucay aspiraba el olor de su perfume mientras mis labios recorrían su cuello sintiendo lo áspero de su barba rasurada, poco a poco deje caer el peso de mi cuerpo sobre su verga recién lubricada por mi saliva, está vez el ...