Mi padrastro me enseñó a culiar - Relatos Eróticos

Mi padrastro me enseñó a culiar

... su dedo en mi coño, lo oí suspirar y me dijo, la tienes calentita, volvió a hundir su dedo y a sacar, solo un poquito y poquito a poquito fue metiendo el dedo hasta meterlo todo, al poco venía un bus de la ruta y tuvo que parar, yo tenía muchas ganas y el me dijo que quería  culiarme, yo tenía un poco de pena, no dije nada llegamos a un lugar un poco desolado y se bajó pero pasó un taxi picuk y tuvo que volver al auto, me dijo que me llevaría a un lugar tranquilo, pero le dije que el debía volver a su trabajo y yo a la escuela. El quería faltar a su trabajo. Pero yo tenía miedo que mamá se diera cuenta que no había ido al colegio. Así que le dije que mejor era ir al colegio y el a su trabajo. Pude ver su verga bien dura en su pantalón. Yo ya conocía muy bien esa verga, Cúando los espiaba.
El me dejó en la escuela y se fué. 
Esa noche lo oí cualirse a mamá muy duro y rico. 
Al día siguiente llegó más temprano, no tenía ni la comida lista, llegó y me metió en mi cuarto se bajó su zipper y me dijo que le mamara la verga, jamás la había tenido tan cerca, me la metí en la boca, estaba mojada y un poco salada y el me agarró la cabeza y empezó a penetrarme la boca. Muy rápido y duro hasta que se vino en mi boca, se limpió la verga y salió de mi cuarto. Pues estaban los muchachos de la construcción. 
Esa noche, mientras dormía desperté asustada sintiendo una mano en mi coño,,era mi padrastro corriendo a un lado mi panti, y por primera vez sentí su lengua en mi coño, me lamia ...

... toda la cuca y me la metía toda la lengua hasta lo más profundo, podía oír como se pajeaba, empezé a excitarme aún más y por primera vez sentí el temblor del orgasmo, al poco tiró su leche en el piso y se fue. 
Así fue pasando los días, se pajeaba haciéndome el oral en las noches, tocandome en a la hora del almuerzo y de camino a mi colegio. 
Hasta que lo regañaron en su trabajo por no hacer el número de ruta completo.
Ese día no pudo venir antes, pero llegó a la hora normal y me dijo que hoy el no terminaría la ruta hasta que sea la hora e recoger a mamá, que el había pedido permiso y que yo o iría a él colegio. 
Iríamos a otro lugar, lejos que nadie nos viera. 
Me llevó a un lugar llamado Ancón, es un motel de paso, y estando ahí pagó y entramos, apenas cerró la puerta, me quitó mi uniforme y el su ropa, su verga ya estaba dura, de tanto dedo que me habia dado en el camino. Le dije que tenía un poco de miedo y el me dijo que no me preocupara, que el me iba a tratar muy bien. 
Me beso con mucha pasión y de mis labios pasó a mi cuello. Ahí sentí muchas cosquillas y sus labios fueron bajando por mis tetas. Me dió pena que el me chupara las tetas, me dijo tenerlas duritas y paraditas, sus manos me apretaba la cintura o las nalgas, sus labios volvieron a bajar lentamente hasta mi coño y empezó a mamarmelo, su le gua entraba y salía de mi coño, hasta mi ano me lo lamia, me cargó me acostó en la cama y se agarro la verga le puso saliva y la estrujo en la entrada de mi coño, la ...