Mi amigo Diego
Fecha: 16/09/2018,
Categorías:
Hetero
Autor: julieta_7446, Fuente: RelatosEróticos
... conversación y llego el silencio incomodo, no había más que decir, Diego sorprendentemente me beso y yo no lo podía creer, no me imagine que lo hiciera de ninguna forma, siempre pensé que yo tomaría la iniciativa. Respondí a su tímido beso con pasión, disfrutando mucho el momento. Repentinamente se separó, me miro a los ojos y me dijo: Me gusto… Con esas palabras me arrancó una sonrisa, colocó sus manos alrededor de mi cintura y volvió a besarme. Quise darle mi mejor beso, sensualmente chupe su lengua, mordí sus labios dulcemente, suspiraba suavemente, todo con el fin de volverlo loco; el me correspondía dejándose llevar. Sus manos comenzaron acariciar mi abdomen intentando con disimulo subir hasta mis senos, yo coloque mis brazos alrededor de su cuello y el, ya un poco excitado, me invito a sentarme sobre sus piernas. Lo hice, ya así el con su mano izquierda acariciaba mi espalda y con la derecha me seguía tocando mi abdomen, empezó a besarme el cuello y suavemente bajaba hasta mi pecho intentando con la boca sacar uno de mis apretados senos de la blusa, su mano izquierda bajaba hasta tocar la parte final de la espalda por donde sobresalía mi hilo, sus manos recorrieron el trayecto del hilo en mi espalda y su otra mano, ya con más confianza me tocaba el pecho. La cosa estaba candente pero no podíamos ir mas allá, lamentablemente su familia estaba en casa y nos podían ver, así que tuvimos que frenar el momento, caer en la incomodidad de estar tan cerca y no poder hacer ...
... nada. Eran casi las doce cuando decidí que mejor era irme antes de que pasara alguna locura.
Transcurrió el tiempo y planeamos otros encuentros pero todos fallidos. A diferencia de las veces anteriores esta vez Diego no ponía oposición sino que factores externos arruinaban la ocasión. Hasta que llego un día viernes y decidí secuestrarlo. Le envíe un texto una hora antes de salir del trabajo, le dije que se preparaba que al salir del trabajo pasaba por el y asi fue. Tome un taxi hasta su casa y nos dirigimos hasta un hotel en las afueras de la ciudad, pedimos una habitación con jacuzzi. Llegamos a la habitación y me quite mi uniforme del trabajo, le dije que quería bañarme antes que nada y el acepto. Me espero pacientemente mientras yo me duchaba para quedar bien limpiecita para él. Salí del baño con la ropa interior más sexi que tengo (brasier negro e hilo con encajes y malla negra), el me esperaba acostado en la cama viendo la televisión. Me recosté sobre el besándole la boca, el colocaba sus brazos alrededor de mi cuerpo acariciándome. Metí mis manos debajo de su franela y toque su pecho apretando sus pezones sin dejar de besarlo y seguidamente le quite la franela. Bese su cuello y fue llegando a su pecho para morder sus pezones mientras con mis manos comenzaba a quitar su pantalón sintiendo su pene ya duro. Fui besando el camino hasta su hermoso pene con dulces besitos hasta que lo tuve en mi rostro. Lo agarre con mi mano derecha y empecé a llenarlo de saliva. Lamí todo su ...