Amén señor pastor, me acosté con su mujer - Relatos Eróticos

Amén señor pastor, me acosté con su mujer

... también sentí algo especial en aquel abrazo... y ahora me convenzo de que es, pero necesito..." "¿necesitas?" Y se da vuelta, la estaba apretando, respirabamos el aliento del otro, nuestras narices se tocaban, mis manos encima de las de ella, "también creo que es una necesidad humana la de caer" y la bese, ella correspondió al beso, era petisa, abajo de nuestro piso estaba la iglesia, vacía, solo nosotros en todo el edificio, nosotros en el segundo de tres piso, en el último habia una habitación vacía, recordemos que antes era la casa de mi tío. Nuestras cabezas iban que de atrás para adelante invadiendo el espacio del otro con los besos tan apasionados. Tome todo su culo, que como toda evangelica, lo tenía enorme, la di vuelta, me baje el pantalon, saque el pene y empece a menearselo, debía agacharme un poquito nada más, ella tenia el pelo suelto, castaño. La tome de los pelos y empece a darle por atrás. Ella me dijo "vení, arriba hay una habitación" fuimos a la habitación y había una cama. ¿qué hacia ahí? Me dijo que eran para futuros inquilinos de la iglesia, hermanos de otros lugares que pasaban a predicar. Nos ecostamos y me la empezó a chupar, arriba y abajo, me chupo ambos huevos, tome su cabeza e hice como taladro, se la meti una y otra vez por la boca, era algo nuevo para ella, se me queria subir encima pero no la deje, la puse boca abajo, le abri las nalgas y se la meti a mi forma. "Aaaay, te equivocaste de agujero" ... "eso crees vos" le dije, le hice agarrar las ...

... sabanas, eso me hizo pensar que el santurron idiota de su esposo solo se lo hacia por la vagina como dios manda, nunca por el ano, me dijo que desde la preparatoria no lo hacia con alguien que se lo metiera por ahí, curiosamente época donde conoció a su ahora esposo pastor. Le perforé el culo, se la metí con tanta furia. Agarraba su cabeza y se la golpeaba una y otra vez contra la almohada, la trataba asi no porque la odiara o algo, sino porque sé que al estar casada con un monigote religioso lo que ella necesita es que la dome una bestia, no un caballero blandito, ella necesita una mejor nueva experiencia, no siempre la mujer del pastor peca de esta forma. Le dije "tengo una idea, deja la ropa acá y acompañame" la lleve por las escaleras hasta abajo, la subí al altar, me decía "estás loco", la puse delante del sostén de madera donde el pastor pone su biblia y me la cogí parada ahi, la tome de nuevo de los pelos y le daba bien duro, agarre la silla, la senté ahí y en el mismo altar le chupe toda la vagina, mi lengua se paseaba por todos sus labios vaginales, pensaba dentro mio "lo estoy disfrutando, pero esto es más por ella que por mí, necesito que la pase de puta madre, que no lo olvide y que no se arrepienta, que lo disfrute, necesita una rebelión así por lo menos una vez." Me la lleve a uno de esos asientos en el publico que son largos, nos rescotamos como pudimos algo incomodos y me la seguí cogiendo. Mi pene entraba y salía y sin importancia de que algún rastro de semen ...