1. Amalia y Truman


    Fecha: 19/09/2018, Categorías: Zoofilia Autor: ClaudioColZoo, Fuente: SexoSinTabues

    ... percaté que en la silla a mi espalda había un mujer relativamente mayor, le puse 50 años que se estaba dando cuenta de lo que yo veía en el celular, a lo cual tuve una sensación de vergüenza que inmediatamente me subió la temperatura y creo me sonrojó visiblemente, me levanté porque era el momento de hacer fila para ingresar al avión y justo a mi lado se puso ella, la cual evitaba mirar, pero sentí cuando una mano agarró mi brazo y colocando mi mirada al frente sentí cuando ella se acercó a mi oído y me dijo con una voz sensualmente perturbadora, “no te preocupes hay cosas naturales que son socialmente incomprendidas” la miré, y me hizo un suave giño de ojo al tiempo que con sus dedos agarraba una joya en oro con la forma de una huella canina y bajo ella el nombre de “Caín” atada a una vistosa cadena del mismo material. Durante las casi 5 horas de vuelo no podía apartar aquella experiencia de mi mente, de hecho no pude conciliar el sueño en el viaje y tenía una especie de ansiedad por llegar aunque aun no sabía si confrontar la situación y en caso tal, que determinación tomar. Cuando llegué a eso de las 4 de la tarde Truman me recibió alegremente como siempre y Amalia me saludó con su acostumbrada jovialidad y cortesía, me consultó si me preparaba algo para cenar y le dije que no, entonces me dijo que ya dejaba todo arreglado para que luego ella se fuera a su casa, le pedí que se quedara esa noche, me sentía algo estresado y le dije que iba a salir, en mi mente había ...
    ... planeado ir a un reconocido club nocturno de la ciudad y pasar un buen rato entre licor y bailes eróticos. Pasaron algunos días y decidí no confrontar por el momento las cosas, sin embargo si estaba atento a las cámaras, y logré encontrar un patrón de actividades, las cosas por lo general ocurrían en la mañana, teníamos por costumbre bajar juntos en el ascensor, de mi parte me quedaba en el piso del parqueadero y Amalia bajaba a la recepción con Truman para su rutinario paseo mañanero, sin embargo varios días después decidí que iba presenciar en definitiva como eran sus actividades y por ende una mañana bajamos los tres como era costumbre, me quedé en el piso del parqueadero, pero esta vez decidí esperar unos minutos y volví a subir al apartamento, desde la ventana de mi habitación y con mucha discreción podía observar las persona que entraban al edificio, y, como a la media hora llegó Amalia de su paseo rutinario, mi corazón comenzó a latir de forma mas rápida y sin lugar a dudas estaba entre expectante y excitado, una sensación muy similar a la calma antes de la tormenta que se sabe llegará, pero no dudé, estaba decidido a saber de una buena vez lo que pasaba en el cuarto de huéspedes, donde no había colocado cámara, ya que hasta el momento las cosas entre ellos dos solo empezaban en la sala y terminaban en el cuarto, así que me escondí en el closet tan pronto sentí la llegada del ascensor y dejé la puerta relativamente abierta con una vista privilegiada hacia la cama desde la ...
«1234...7»