MAMI, QUIERO LA NENA! 2
Fecha: 03/03/2023,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: CARAMELO, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... sobre mi boca, la hice tirarse sobre mí y… nos convertimos en un 69. Aldi se quedó entre mis piernas lamiendo y mamando al compás de Efi.
-¡Ay! ¡Ay! ¡Ay papi! ¡Me vengo! - La pequeña fue la primera en gritar.
-¡Pero no te salgás! ¡Quiero chupar todos tus jugos!
-¡Síííí! ¡Toda tuyaaaa!
Cuando Efi acabó, fue Aldi quien se montó sobre mi cara. Efi fue nuevamente a mi pija. Los excelentísimos fluidos de Aldi me bañaron a los cinco minutos. Yo me enfrascaba en las conchas que chupaba, para no pensar en mi pija…, pero las nenas insistían a turnarse en el 69.
-¡Chicas, por favor! ¡Quiero penetrarlas!
Me acosté y Efi se montó de frente. Cabalgaba frenéticamente, mientras yo le amasaba las tetas. Aldi estaba entre mis piernas lamiendo el culo de la nena y mis bolas.
Unos minutos nomás, hasta que un chirlo de Aldi, le dio la “orden” del reemplazo, pero de espalda y por el culo. La otra a mi cara. Por suerte estaban súper calientes y tenían orgasmos tras orgasmos, lo que las ponía muy contentas.
-¡Papito! ¡Qué lindo que es coger con vos! – Efi confirmaba lo que opinaba Aldi.
-¡Si, dale, dale! - Ambas se turnaban permanentemente sobre mí. Una por el culo, la otra por la concha, de frente para chupar tetas, de espalda para saborear culos… Cuando una lo tenía enterrada, la otra venía sobre mi cara. ¡Estaban frenéticas! ¡Me encantaba esa sociedad sin envidias ni competencia! ¡Y todo entre risas!
-Un momentito nenas, tengo que descansar…
-¡Pero si no acabaste!
-Pero me falta ...
... poco, y quiero toda la energía – A pesar de haberme tomado dos pastillitas, yo dudaba… ¡Estas chicas eran inagotables! No se quedaban un segundo quietas… La que montaba de espalda, mientras tenía la pija en el culo, recibía las caricias en el clítoris de la otra. ¡Todo risas! ¡Suspiros, gemidos y gritos…!
-¡Mami las debe oír desde el kiosco!
-¡Jajaja! ¡Ya voy por el quinto orgasmo!
-¡Yo por el sexto! ¡Te gano! ¡Jajaja!
Antes de que siguieran estrujándome, me paré en el piso, al borde de la cama, y acosté a Efi de espaldas, en el borde.
-Con las piernas bien abiertas. ¡Agarrátelas!
-¡Yo también! – A su lado se acomodó Aldana. No perdió un segundo. En un instante estaban las dos ofreciéndome culo y concha.
Les di como correspondía. ¡Ahora sí estaba dispuesto a acabar! ¡Una maravilla! Mientras se la metía por el culo a una, la otra la masturbaba…, y yo le metía los dedos a la que se quedaba sin pija. A una y a otra. No pasaron cinco minutos…
-Efi, vos sos más livianita. ¡Montante sobre Aldi! – De esa manera tenía ambos culos y conchas a mí al alcance, una arriba de otra. Le metí los dedos a una y la pija en el culo a la otra. Gritaban y reían de placer. Yo siempre parado en el piso. Ahora era yo quien dirigía las acciones…
-¡Ya va! ¡Va! ¡Vaaaa! – Solté a las dos y me erguí.
A mis pies, con las bocas bien abiertas y las lenguas afuera estaban las nenas. Los chorros que les mandé llegaron hasta la garganta. Tragaban encantadas, con la mejor sonrisa y ambas metían dedos ...