De viudo jubilado a macho dominante de tres hembras - Relatos Eróticos

De viudo jubilado a macho dominante de tres hembras

... poco las piernas y comencé a masturbarme frente a ellas, Luisa me dijo "como que no le quitó todas las ganas mi mamá don Roberto" yo les respondí esque ustedes me pusieron caliente. En serio contestaron ellas, pero si nosotras no tenemos el cuerpo que mi mamá tiene qué le puede calentar eso? Yo les repndí " para un viejo como yo su fantasía es cogerse a unas nenas como ustedes. 

A todo eso de la conversación yo ya estaba masturbandome con un buen ritmo, las nenas estaban como a un metro y medio de mi sin quitar la vista a mi masturbación. 

Hubo un momento de silencio en donde solo se escuchaba mi saliva que lubricaba mi gran verga, me acerque un poco a ellas y le bañe las piernas de semen a Luisa, cuando el chorro de semen chocó en su entrepierna también le salpicó unas gotas a su hermana. Mi verga se vino al suelo y yo quedé exhausto, yo agarré unas servilletas para limpiar el semen que había caído en el piso pero Cristina me detuvo y me dijo tranquilo don Roberto yo lo voy a limpiar, gracias nena respondí. 

Yo me fui a la ducha para darme un baño pero Me quedé observándo desde un pasillo que hay en la casa y pude ver como agarraban el semen con sus dedos y se lo pasaban en sus labios. Yo no podía creer lo que me estaba pasando era evidente que mi vida iba a ser de aventura extrema. 

Después de ese día se me volvió una adicción que las nenas nos encontrarán cogiendo en la sala, Julia se quedaba dormida en el sofá y yo hablaba desnudo con las nenas después de ...

... coger a su madre ya se había vuelto una rutina, me masturbaba frente a ellas y me habían pedido que les acabará en la cara ya que unas amigas en la escuela les habían dicho que una madre de familia dijo que el semen era bueno para que no salieran espinillas así que yo ne ofrecí a bañarles sus caritas de mucho semen. 

El tiempo pasó y cuando cogiamos con Julia yo le confesé que sus hijas me ponian caliente y que ya no las veia como mis hijas sino como mujeres, entonces julia me autorizó cogerme a ambas hijas pues habia yo hecho mucho por ellas y que solo con sexo podian pagarme todo lo que habia hecho. Yo no dude en aceptar la propuesta de Julia pues sus hijas estaban en pleno desarrollo. 

Semanas despues de haber recibido el consentimiento de Julia para cogerme a sus hijas las nenas nos encotraron cogiendo como ya era de costumbre. Cuando terminamos Julia se quedó dormida en el sofa y yo agarre de la mano a la menor quien estaba preparándose el almuerzo y me la llevé a la ducha le quité la ropa y nos empezamos a duchar juntos. 

La nena estaba super rica todo muy duro, sus nalguitas sus tetitas super duras y pequeñas y su pupusita bien peludita y carnudita. Yo le dije "nena ahora no te voy a hechar la leche en tu cara sino adentro de ti muy hasta el fondo para que sepas que es ser mujer" ella me contestó esta bien don Roberto, en la ducha nos tocamos todo nuestros cuerpos ella me acariicio con mucha delicadeza mis huesos peludos y mi vergota, también me acariciaba con el ...