TAREAS EN EL HÍPER 2
Fecha: 16/06/2023,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: CARAMELO, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
Y así fue. Llegué con tal calentura, que ni le saqué el salto de cama con el cual me esperaba. Antes que terminara de besarme la había puesto en cuatro y levantándole la ropa, se la clavé hasta los huevos.
-¡Papi, que lindo! ¡Venías calentísimo!
-Es que hace mucho que no te la metía…
-¡Jajaja! ¡Más de cinco días!
-¡Un montón para mí! ¡Siempre extraño tus agujeritos!
-Si, claro. Yo también…, no mis agujeritos…, sino que no los tengo ocupados por vos. ¡Me falta algo! Hoy tengo tiempo hasta que se me dé la gana… Mamá me dejó. Ya habían venido ella y Clarisa…, y te tuvieron bien adentro, en todos los agujeros. ¡Ahora me toca a mí!
Cuando Aldi llegó al orgasmo, me acosté boca arriba. Ella inmediatamente se la clavó en el culo para cabalgar.
-¡Así papito! ¡Así! ¡Llename! - Sus giros, refregadas hacia adelante, hacía atrás, provocaron una rápida acabada de mi parte, además de la calentura que traía de Danna. Y Aldi me acompañó con un nuevo orgasmo.
-¡Qué lindo! ¡Te extrañé tanto! Clarisa me contó todo lo que hicieron en la residencia. Me dijo que en esas… treinta y seis horas, se tragó como diez acabadas! ¡Además de chuparle la concha y el culo a una nena un montón de veces! ¡No me la quiero perder! ¡Espero que me llevés!
-¡Por supuesto! – No la iba a dejar así, con tan poco. Fui con la boca a su ingle. Besé sus muslos, su monte de venus, le levanté las piernas y pasé la lengua desde el arrugado y rosado hoyito del culo hasta el clítoris… ¡Cada rinconcito y cada pliegue ...
... de la conchita!
-¡Sí papito! ¡Así! ¡Así! ¡Qué rico! – Aldana temblaba toda. Puso sus manos sobre mi cabeza. La tomé de las tetas, amasándolas. - ¡Papito! ¡Hooohhhh… sííí, siii, estoy…, siii me voyyyy…!
Su orgasmo fue mayor que los anteriores. Abundante chorro inundó mi boca. ¡Riquísima! ¡Toda ella!
-¡Quiero mamarte! ¡Dale! – Sin esperar mi respuesta se colocó para el 69. La tomé de los glúteos y le metí un par de dedos en el culo. Sabía que le encantaba. – Si papito…, luego me tenés que llenar el culito… ¡Sí!
No habló más. Tenía la boca ocupada en mi pija. Con la lengua la levantaba, para tratar de ponerla morcillona. ¡Lo iba a lograr, sin duda! Me había tomado un par de pildoritas cuando venía del “trabajo”.
-¡Hhhuuuummmmmmmmm! ¡Ahhhh! ¡Qué rica! – Aldi estaba totalmente dedicada a lograr el “parate”. - ¡Hhhuuummmm! ¡Falta poquito!
Ya lo sabía. Luego de su exquisita mamada, si bien no tenía esperma, quedaba tan dura que se la podía meter por el culo, que ella, por supuesto, había “acondicionado” durante el día.
-¡Ya está papi! ¡Metemela! – Se levantó y se colocó en cuatro. Me enanqué…, y la cabeza fue entrando sin dificultad. - ¡Dale! ¡Hasta el fondo!
Comenzamos el rítmico bombeo. La nena acompañaba con el movimiento de las caderas…, hacia adelante, hacia atrás, junto con el choque de las bolas contra los labios externos. Ahora le metí dos dedos en la concha y con el pulgar acaricié el clítoris. La técnica era infalible… ¡Tres minutos y Aldi llegó a un nuevo ...