En la cabaña - Relatos Eróticos

En la cabaña

... voy…
(Ella) está bien.

Se fue hasta la cocina, desde allá me preguntó si quería algo de comer a lo que respondí que no.
Vino con la taza tomada con ambas manos, su bata se había abierto un poco adelante y dejaba ver el necimiento de sus pechos…la verdad que esto me me había puesto caliente, veía que me estaba excitando sin sentido y que tenía que irme sin más, pero me atraía demasiado como para dejar pasar eso.
Tomé el café mientras ella metía mi ropa mojada en una bolsa, se acercó a mi y me dijo que no me la olvidara. Luego giró y su enorme culo parecía llamarme.
Hizo que mi verga se pusiera dura, a tal punto de sentir dolor, los latidos de mi corazón dificultaban mi respiración, en ese momento mi cabeza estalló, fuí por detrás, la tomé con fuerzas de sus pechos, arrimando mi pene a su hermoso culo

-(ella) pero que hace, suelteme!!! Está loco?
-(yo) cállate la boca que por más que grites no te va escuchar nadie…
Forcejeó queriendo zafar, pero ya una de mis manos se deslizaba por debajo de su bata para llegar a su vagina…al principio puse toda la palma, ocupando toda su entrepierna, luego metí el dedo índice, ella cerraba las piernas tratando de impedirlo, luego con la otra mano desate su bata, dejando al descubierto su cuerpo en la parte frontal, a pesar que gritaba empecé a pasar mi lengua por su oreja, esto le produjo un escalofrío, al tocar sus tetas me dí cuenta que sus pezones estaban súper erizados, los apreté con la punta de los dedos de mi mano izquierda, ...

... mientras que la mano derecha estaba jugando en su vagina. Forcejeamos un poco hasta que la puse boca abajo en el piso, levanté su bata para ver ese culo que me había exitado tanto, ahí estaba esa escultura, grande…duro…bien paradito. 
Sin mediar más saqué mi verga con la mano derecha, luego salibe mis dedos y los unté en el diminuto agujerito rosado. Posé la cabeza de mi verga allí para penetrarla, ella se retorcía tratando de esquivarlo, la tomé fuerte del cuello y le dije que se quedara quieta. Ella me pidió que la dejara.

-(ella) Por favor déjeme, no me haga daño, se que usted es un buen hombre!!!
-(yo) soy un buen hombre, pero me calentaste demasiado y ahora te quiero cojer…

En ese momento hice fuerza hacia adelante y sentí que la cabeza de mi verga se enterró dentro de ella

(Ella) ayyyy nooo, me duele, no lo haga por favor noooo ayyyy
(Yo) cállate y déjame que te coja …uhhhh mira como te entró la cabeza, ahora te la meto toda!!!

Ahí con más fuerza terminé por meter toda mi verga adentro, empecé a meter y sacar con violencia como nunca la había hecho, podía sentir como trataba de cerrar ese agujerito, a la vez se movía hacia los costados

(Yo)Te gusta así fuerte putita, te gusta que te den por el culooo???  
(Ella) me dueleeee…ya basta por favooor
(Yo) lo tenés muy estrchooo…
(Ella) ayyy, ayyy me dueleeee
(Yo) querés que lo saque?
(Ella) mmmm me duele…se lo suplico!!!
(Yo) me encanta que te duela, que sufras, que me supliques

De pronto sentí que ...