Pequeña adolescente - Relatos Eróticos

Pequeña adolescente

... ese momento entre nervios e inocencia me sonreí, esto fué como motivarlos a más, unos de ellos me tomó por detrás y me levantó en andas, metiéndome en el edificio, quise gritar, pero una mano me tapó la boca, después sentí que todos entraban riéndose, uno pasó frente a mí, me levantó mi remera y empezó a manosear mis tetas, yo me quería zafar, me movía para todos lados, pero sus manos iban reduciendo mi esfuerzo. Después desprendió mi sostén de un tirón dejando mis tetas al aire, se acercó y empezó a chuparlas, hizo que me dolieran los pezones, podía sentir el olor a alcohol que salía de sus bocas. Otro empezó a tironear mi pantalón hacia abajo, lo sacó junto con mi bombachita, quería gritar y no podía una mano seguía tapando mi boca, como pude lo mordí, puteandome agarró del piso la bombachita y me la introdujo en la boca, después pasó su mano hacia adelante y empezó a manosear mi vagina, intenté por todos los medios cerrar las piernas pero no me dejaban. El que me tenía en andas me llevó hasta una mesa bajita que estaba toda sucia y me puso boca abajo, el que me estaba chupando las tetas me agarró las manos hacia adelante y otros dos me abrieron las piernas, el más grande se puso detrás mío y de un solo movimiento me enterró su pene dentro de mi vagina virgen, el dolor fué indescriptible, en ese momento el mundo se me vino encima, me quedé quieta, sentía que las piernas me temblaban, un líquido caliente que me corría entre las piernas, así estuvo un rato, no sabría ...

... decirte cuánto tiempo en realidad, el que me tenía agarrada de las manos buscó una soga que estaba colgada sobre la pared y me ató las manos. El que me estaba violando empezó a moverse cada vez con más fuerza hasta que se descargó dentro mío. Después salió y vino otro no lo podía ver, pero puedo decirte que olía muy mal, este me empezó a chupar el culo y la vagina, sentía esa lengua áspera raspar mis nalgas, hasta el desgraciado me empezó a mordisquear el clítoris produciendo mucho dolor. A esa altura ya no tenía fuerzas ni para resistirme, luego se puso frente a mí y se masturbo hasta terminar en mi cara. El que estaba mirando pasó hacia atrás y con ambas manos abrió mis cachetes y arrimó su pene a mi culo. Empezó a ejercer presión, sentí como si al orificio me lo cortaban con una navaja, un dolor poco difícil de soportar, en pocos segundos tenía todo su pene adentro, lo sentía casi en la garganta, empezó a moverse, algo produjo un hormigueo en mi panza, sentí mucho calor de golpe, mi vagina empezó a mojarse de a poco y de pronto sentí ganas de gemir, como tenía tapada la boca eran más sonidos raros y gestos que otra cosa, unos de ellos se percató de esto y destapó mi boca para poner su pene, sabía algo salado, no se porqué pero empecé a mamarlo con ganas, lo que era dolor de culo pasó a ser cada vez más excitante, un tercero se acostó en el piso y me pidió que lo montará, así que me soltaron las manos y fuí hasta el, el que me está clavando en culo me acompañó hasta allí sin ...