Mi tio el profesor hetero, octava parte, el abogado - Relatos Eróticos

Mi tio el profesor hetero, octava parte, el abogado

... follaba mucho mas fuerte. Date la vuelta putita, te voy a cojer como mujercita. Yo me doy la vuelta y me recuesto bocarriba. El toma mis pies y los atraviesa por sus caderas. Yo me sentia totalmente dominado en ese momento. Admiraba al macho encima de mi, todo un galan dandome su verga bien rico. Yo puse mis manos alrededor su cuello y el se acerco y me besaba el cuello. Era tan tico, sentia una electricidad recoriendo mi cuerpo, sus labios tan ricos me encantaban, su barba raspaba mi piel y me encantaba. Roberto me miro a los ojos y empezo a penetratme de nuevo. Su polla entro rapidamente y el empezo a darme lentamente. Yo ya podia empezar a sentir el olor a macho que venia de el, su sudor en la frente y los pelos de su pecho empapados. Dame duro papi, rompeme el culo hasta que sangre. Como gustes zorrita, te voy a dar bien rico como nunca te han dado. El empieza a follarme muy fuerte de nuevo, el sofa se sacudia tan fuerte que temia que se quebrara, nuestra follada era tan intensa y deliciosa. Yo le apretaba la verga con el culo, y eso parecia estimularlo mucho mas porque gemia muy fuerte cuando yo hacia eso. Yo le acariciaba la espalda que era muy grande, sus hombros eran muy anchos y eso lo hacia ver como un gigante encima de mi. Mi cuerpo lampiño de nena bajo el cuerpo inmenso de un macho maduro, el pensar en eso me excitaba mucho mas. El me follaba rico por mucho rato, su sudor caia encima de mi y ya estabamos totalmente cubiertos. El solo gemia y ceraba los ojos ...

... con la cabeza hacia arriba, como un tigre contemplando a su presa. Pasado un rato ecuchamos una voz que venia de afuera, era la niña. Papi, papi,quiero entrar. El me tapo la boca y me seguia cojiendo y le dijo: No bebe, espera papi edta ocupado, vete a jugar un momento. No papi quiero entrar, porfavor. No bebe esperate un rato. La niña empezo a llorar muy fuerte detras de la puerta. El se congelo y intento ponerse de pie. Yo envolvi mis piernas alrededor su cadera para que no escapara y lo tomaba de el cuello. El hacia un esfuerzo para ponerse de pie pero no podia. Sueltame, tengo que ver a mi hija. No papi, aqui me dejas tu leche o no te vas. Era inutil todo lo que intentaba para separarse, y entonces le dijo a su hija: Bebe, ve a la recamara y llamas a mama para pedirle como le va, y entonces viernes a contarme vale? La niña dejo de llorar y se fue a hacer el mandado. Su papi entonces me tomo de las manos y las puso contra el sofa. Una cara de agresion lo invadio y me empezo a follar de nuevo. Me follaba muy duro que mis nalgas estaban rojas por las embestidas. Sus huevos chocaban contra mi culo y su cabello estaba ya todo alborotado y esponjado, definitivamente el abogado se habia convertido en todo una bestia sexual. Me imaginaba a la profesora platicando con su hija mientras su esposo me llenaba el culo tan rico, creo que ella nunca lo habia tenido como yo en ese momento. Roberto empezo a gemir mucho mas, era como su le estaban dando de golpes. Yo gemia al igual como ...