La feminista corregida
Fecha: 20/08/2023,
Categorías:
No Consentido
Tus Relatos
Autor: Vanessa, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... pero no para evitar que me masturbara, sino que me movía para que sus dedos frotaran mejor dentro de mi vagina y tocaran mi punto g mientras soltaba más mis jugos.
Después de un rato de tenernos gemir, sentimos como la camioneta se detuvo, pensando que nos dejarían en paz para meternos a la fiscalía, pero estaba en un error, ya que al abrir la puerta y bajar estábamos en la cochera de lo que parecía una casa en obra negra, al bajarnos nos dirigimos a uno de los cuartos en esa casa, sin ventanas y con olor a todo tipo. Nos tumbaron en el suelo mientras se quitaban parte de su equipo y uniforme, solo dejándose los pasamontañas, mientras hacían eso nos decían que tenían la orden de darnos una buena lección para que se nos quitaran las ganas de volver a estar de revoltosas.
Al estar desnudos me quedé sorprendida y excitada al ver el tamaño de sus vergas, ya había tenido parejas, pero de mi edad en promedio, no pensé que señores de su edad que ya se veían entre 40 y 50 años tuvieran tremendos animalotes entre las piernas. Trague saliva al saber lo que vendría, las chicas estaban en shock, y en el momento en el que uno dio la orden de que nos dieran, empezaron a moverse hacia nosotras agarrándonos de a 2 policías por cada chica.
Se acercaron 2 conmigo y rompieron mi blusa y mi bra me lo desprendieron, me levantaron y me quitaron mis leggins y mi cachetero, yo estaba cooperando como si ya no tuviera otra opción, después de eso me pusieron de rodillas para mamarles sus cosotas, ...
... me detuve porque estaba tratando de asimilar lo que pasaba, pero en ese momento sentí una cachetada fuerte mientras me decían que abriera el hocico, no tuve otra que hacerlo y empezarle a hacer un oral a los 2.
Mientras lo hacía nos decían a todas que si hablábamos en su contra meterían evidencia contra nosotras como putas drogadictas y nadie dudará de sus palabras. Uno de los policías empezó a mover mi cabeza sobre su palo follandome la boca sin piedad, metiéndomela hasta la garganta y provocándome arcadas. Siguió metiéndomela con furia en la boca hasta que casi me dejó sin respiración.
Yo respiraba agitada y el otro se puso impaciente, me golpeó nuevamente la cara con fuerza haciéndome salir lágrimas. Lentamente me agaché y me metí la punta de su verga en la boca succionando con ganas, haciendo que el hombre suelte gemidos. Yo seguía chupándosela con miedo de que me golpee de nuevo.
Cansados de que se las chupara, uno se tiro boca abajo, me ordeno montarme en su verga y lo hice de una, entro fácil porque yo estaba chorreando. El otro poli se puso detrás de mí, agarró bien mis caderas y sin piedad me metió toda su verga en la vagina en el culo mientras yo seguía gimiendo más, mi mente estaba en blanco gozando esas vergas venudas que palpitaban con cada metida de verga y escuchaba los gemidos y peticiones de mis compañeras de que querían más.
Siguieron así un buen rato saliendo y entrando en mi cuerpo, unas veces me perforaba el culo, y otras era mi vagina, intercambiaron ...