Gesa Mi Jefa Amable - Relatos Eróticos

Gesa Mi Jefa Amable

... hacer ese tipo de comentarios, yo sé que no tienen nada de malo, pero luego la gente lo malinterpreta y termina haciendo chismes y esas cosas, así que… - Guardé silencio por un momento - Como el día de la posada, que recién te habías pintado el cabello de rojo, y a pesar de que venias en jeans y una blusa mientras que las demás mujeres venían vestido, te veías bastante bien. Por no decir que resaltabas - Concluí finalmente.Oh vaya, recuerdas cómo iba vestida - Me miró intrigada.sí, y como te digo, pensaba en hacerte el cumplido, pero preferí quedarme al margen… - Levante ambos brazos - Irónicamente terminé en un chisme igualmente - Ella echó los ojos atrás.Irónico ¿No? - Nuevamente hizo una mueca.Al poco tiempo tocaron la puerta y yo me retiré del lugar, continúe con mis labores con tranquilidad y el resto del día transcurrió sin ninguna anomalía, y el resto de la semana también, salvo quizás un pequeño detalle, pude notar que Gesa se veía mejor los últimos días, no sé si se maquillaba mejor o si estaba llevando algún tratamiento de belleza. Pero incluso en la forma que llegaba era diferente ahora, normalmente llegaba temprano y se maquillaba o retocaba el maquillaje en lo que los demás llegábamos. Ahora siempre llegaba lista.Poco tiempo después, quizás un par de semanas, nos preparábamos para salir, eran alrededor de las 6 de la tarde, las nubes de lluvia se agrupaban sobre todo a donde la vista volteara, tanto que daban una vista nocturna a todo el lugar, la mayoría se ...

... había marchado ya, y yo esperaba a junto con Gesa a la llegada del taxi que había pedido, “15 minutos” dijo la persona que mandó la unidad. Me encontraba nuevamente en aquel sofá para tres personas, recargado del codo más próximo a ella, justo enfrente del gran escritorio de madera que la rodeaba en una “u”, platicábamos de cosas sin mucha importancia, hasta que, motivado por mi curiosidad, me atreví a preguntar.Últimamente llegas más… - alargué las últimas sílabas - Arreglada verdad - Le miré fijamente¡Como crees! Yo siento que me veo normal - Se inclinó más sobre su escritorio - ¿No será que te estás enamorando de mí? - Alzó la ceja derecha con su mirada inquisidora.Yo me puse rojo, y abrí los ojos de par en par, no esperaba que fuera tan directa, aunque sabía que era ese tipo de persona, trate de calmarme y aunque fue un silencio lo suficientemente largo, logré reponerme de su repentina estocada.Uno no te puede decir guapa porque enseguida se te sube a la cabeza verdad - Le repliqué. Aunque pude disimular mi tono de voz, estoy seguro de que fue un poco temblorosa al final.¡Ay ya no te pongas rojo! - comenzó a reír - ¡No seas tan serio! -No lo soy - Dije calmadamente - Tu eres demasiado alocada, no sabes reprimirte- Repliqué.“Nah” la verdad no - Comenzó a reír.Como esa vez - El recuerdo me llegó de la nada - Cuando trajiste una blusa con un nada disimulado escote, y todos los hombres te miraban de reojo y tu como si nada -¿Cuándo? - Preguntó casi inocentementeFue hace bastante, ...