El maravilloso culo de Avelina
Fecha: 18/10/2023,
Categorías:
Anal
Autor: sir robert, Fuente: RelatosEróticos
... embargo, como el hombre realista que soy, no lo di por hecho, la verdad tenia mis dudas que a la mera hora me dijera que no podía ir, así que le dije,
*Está bien, hagámoslo
,
hoy es miércoles, el lunes empiezas ¿te parece?,
respondiéndome que estaba bien.
Le pedí la documentación requerida, para poderla dar de alta en la empresa, como yo era el encargado general y las vacantes eran de nivel bajo, sin ningún problema me iban a aprobar el alta de ella, así que envié la documentación a la oficina central en México y el viernes, ya estaba dada de alta.
Los días jueves y viernes la invité a la oficina para que se familiarizara con el trabajo, la idea era que fuera unas horas al día a capacitarse, y encantada aceptó, cuando ella se presentó el día jueves, venia vestida más recatada, traía puesto un pantalón de mezclilla algo flojo, pero aun así se le notaba lo generosa que estaba, le presenté al personal que me apoyaba en la oficina, a mi brazo derecho, que era el arquitecto que me asistía en campo, a la secretaria, a un pasante de arquitectura y un dibujante, yo enviaba toda la documentación a México, y allá llevaban la contaduría y obvio en campo estaba toda la fuerza de trabajo, un almacenista, un chofer, albañiles, plomeros, fierreros veladores etc.
Esos dos días, Avelina se quedó a trabajar como una empleada más, cumpliendo con todo el horario laboral, se puso a revisar inventario de material y cotejo lo que marcaba el sistema con lo físico, ordenó ...
... facturas, realizo órdenes de compra, etc. y obvio, cuando ella iba para el almacén, todos los trabajadores que se encontraban ahí recogiendo material o tomando alguna herramienta, se le quedaban viendo; en ocasiones salimos a realizar algunas compras, y aprovechábamos para almorzar, en fin, se le veía cómoda y contenta.
En ese tenor llegó el día sábado, y le comenté que había logrado que la empresa le pagara estos tres días que estuvo capacitándose y apoyándonos con el trabajo, por lo cual se alegró; obviamente era mentira, esos días de trabajo, se los había pagado yo, le realicé el depósito en la tarjeta bancaria que la empresa le había solicitado que tramitara; lo cual para ella fue algo maravilloso, le pregunté si quería comer saliendo de trabajar y encantada me dijo que sí.
Cerca de mediodía, de ese día sábado, llegó la mamá de Avelina a la oficina, le dio mucho gusto ver a su hija trabajando, y me invitó a cenar esa noche a su casa, porque era su cumpleaños, por lo cual la felicité y acepté su invitación inmediatamente, platicamos brevemente, y después se despidió; yo me dispuse a realizar los últimos pagos pendientes de algunos trabajadores, y cuando acordé, ya era la una de la tarde, estando en mi privado, le llamé a Avelina, y le dije en voz baja que nos fuéramos a comer para que no se hiciera más tarde, el arquitecto todavía seguía en la oficina, además de la secretaria y el almacenista, pero no tardaban en irse, así que nos salimos discretamente mi futura conquista y ...