1. Como si no nos conociéramos


    Fecha: 13/11/2023, Categorías: Erotismo y Amor Autor: Legasex, Fuente: CuentoRelatos

    Después de un largo tiempo sin poder escribir nada, mis fantasías, experiencias, imaginación y por supuesto la Señorita R, volvemos a encontrarnos.
    
    Deseaba estar con esa chica y el destino hizo que aquella noche fuera mía.
    
    Aquella noche, la primera noche, coincidimos en un bar, un pequeño bar de copas, en el centro de la ciudad. Nos presentaron unos amigos, y te sentaste en la mesa que compartía con dos amigos y yo.
    
    Cómo esta esa chica pensé, te miraba descaradamente, quería que me dieras una señal, solo una. Desde el momento en que te vi, supe que tenía que acariciar tus labios con los míos, supe que tenía que acariciar la curva de tus caderas, supe que tenía que abrazar tu cintura, besar tus pechos... Imagine que tus pezones tenían que estar entre mis dedos. Nos habíamos conocido en una fiesta casi no habíamos hablado, pero el deseo era mutuo, se notaba, aunque esto lo supe días después.
    
    Dos copas más tarde, tu seguías allí, jugando conmigo, yo me encendía. Nunca me había pasado. No sabía qué hacer, mi cabeza decía que te estuvieras quieta, pero mi pie rozó tus piernas, estaban cruzadas, yo creía que llevabas medias, pero me sorprendí al comprender que esas piernas bronceadas perfectas no eran una ilusión. Tus manos pusieron encima de la mesa. Te levantaste y fuiste al baño.
    
    Creí morirme, pensé que te había molestado. Al volver, te sentaste junto a mí, a mi lado, bien pegada. Respire hondo al notar tu mano en mis muslos. Empezaste a hablar con los dos ...
    ... chicos, queriendo disimular. Apartas tu mano de mi muslo y miras hacia otro lado mientras descruzabas las piernas. No hace falta que nadie me indique el camino. Mis dedos rozan la parte interna de tus piernas, me demoro antes de llegar a mi destino, tú hablas con ellos, yo finjo estar mirando un punto fijo. Con la mirada perdida y como si me interesará lo que hablabais.
    
    Mi mano va subiendo por ti, por ese muslo, tú has cedido y yo gozo de este momento. Tu sexo me espera. Sigo subiendo, tú sigues hablando. De repente bajo mi mano hasta tu rodilla, te quedas callada, como extrañada por mi gesto, inmediatamente vuelvo a subir. Noto tu braguita de algodón. Puedo sentir tu palpitar, tu sexo palpita contra mi mano, subo aún más, y llego, por fin, a mi destino.
    
    Vuelvo a la conversación. Te levantas y me coges de la mano...
    
    - Vamos a la barra y pago la consumición, me dices con esa voz que tanto me atrae. - Ni siquiera hemos dicho adiós. Te dije.
    
    En la calle, entramos en tu coche, me dices marchémonos a un lugar mas apartado. Conduces hasta una playa solitaria, al parar tu vehículo, pones tu dedo encima de mis labios. Apoyas tus labios en él.
    
    -Silencio, silencio. Repites.
    
    Yo siento el alboroto de mi corazón. Palpitó de deseo. Se acelera mi respiración. Siento en tu suave aliento el olor a deseo. Me besas, te beso. Mis manos te buscan, te acarician. Desabrochas tu camisa y me dejas disfrutar de tus pechos, los acaricio, los beso, los muerdo, mientras suspiras con pasión y ...
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