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La chica del centro comercial
Fecha: 13/11/2023, Categorías: Erotismo y Amor Autor: SebastianYLN, Fuente: CuentoRelatos
... alemana que hablaba un poco de inglés y pudo honrarme la devolución. Pude recuperar mi dinero y deshacerme de aquellas malditas cremas, pero me decepcionó no hacer la devolución con Yolanda y al ver su reacción sentirme empoderado ante ella. Le pregunté a la dependiente por ella y me dijo que ese día Yolanda trabajó el turno de la mañana. Le di las gracias y me fui restaurante italiano que tenía planeado ir en el otro día que estuve en el centro comercial. Como estaba solo pedí un espacio en la barra del restaurante. Allí pedí una copa de vino y también pedí el menú para ver que iba a comer. De repente escuché una voz conocida que me preguntaba cómo me iba con las cremas. Al voltear encontré a Yolanda parada al lado mío. Lo primero que salió de mi boca fue preguntar si ella también trabajaba en ese lugar. Con una carcajada me comentó que estaba allí pues era su restaurante favorito del centro comercial. Le dije que había devuelto las cremas y que la felicitaba por ser tan buena vendedora pues me pudo vender algo que con cabeza fría me di cuenta de que no necesitaba. Ella insistió en la calidad de su producto, pero aceptó con buena cara que las haya devuelto. Me dijo que disfrutó mucho mi lenguaje corporal y lo expresivo de mis ojos ese día. Le pregunté que, si hacía eso con todos sus clientes y cambiando su expresión a una seria me dijo que no, que el hecho de que podíamos comunicarnos en nuestros lenguajes principales le hizo más fácil el poder conectar un poco más ...
... conmigo. Me explicó que solo llevaba viviendo un año y medio en Frankfurt, y que aún no dominaba el lenguaje alemán del todo, lo cual hacia fuerte comunicarse con mucha gente allí. Yolanda se sentó justo a mi lado en la barra. Traía el mismo tipo de falda que el otro día, pero esta vez en gris oscuro. Al sentarse volví a apreciar sus muslos sin disimulo, ella no lo noto pues le decía al barman que ella invitaba la copa de vino que me iban a servir. Le dije que no era necesario y ella me dijo que insistía pues quería hacer las paces conmigo luego de la venta innecesaria. La cosa es que nos tomamos par de copas mientras comíamos y conversábamos. La frívola vendedora resulto ser una ambiciosa y talentosa artista con muchas metas y sueños por cumplir. También resulto ser increíblemente encantadora y cómica, dos cosas que me atraen mucho de una mujer. Finalmente pedí la cuenta y ella insistió en pagar. Le dije que cada cual pagaría su parte con la excepción de la primera copa. Al despedirnos le pedí su contacto pues pronto volvería a Puerto Rico y entre la conversación me dijo que siempre había querido ir. Quería seguir conversando, pero ella tenía algo pendiente en su agenda. De despedida le di la mano, ella me dio la suya me halo hacia ella y me dio un beso en la mejilla. Se fue caminando y me quede mirando su hermoso trasero. Ella se viro y me dijo que disfrutara la vista. Llegue a mi hotel y nuevamente seguía pensando en ella. Tenía su número, pero no quería parecer cursi y ...