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Mi novio me entregó a su amigo
Fecha: 30/11/2023, Categorías: Hetero Autor: Shazam, Fuente: CuentoRelatos
... abajo mío porque se estaba ligando los huevazos de mi amor. Yo quedé bien en 4 y el Rodo me daba durísimo y yo aguantaba. El Gordo también agarró el teléfono y con una sonrisa de oreja a oreja filmó a su amigo culeandome literalmente por primera vez. Sin soltar el teléfono se me puso arrodillado adelante mío y yo le empecé a chupar esa pija deliciosa con mucho vicio. El Gordo ya no era tímido. Me agarraba las mechas y me penetraba la boca. El Rodo me tenía de la cintura y gritaba extasiado mientras me daba rápido y fuerte… paraba un poquito. Iba lento… y después arremetía de nuevo. - ¿querés la doble penetración? me dijo el Rodo con voz ronca y excitada. Gordo, tirate al piso y que te cabalgue. No alcancé a responderle que el Gordo ya me estaba sacando la pija de la boca y se estaba acomodando en el piso frío. Sin sacármela del orto, mi novio me fue empujando hasta que quedé cara a cara con su amigo. Creí que iba a ser incómodo, pero la cara de tierno del Gordo preocupado por mí, me estremeció. - ¿Estás bien? Si no querés no pasa nada. Me dijo mirándome serio. Yo le sonreí, acomodé su pija en mi conchita y me la fui bajando de a poco, mientras el Rodo aguantaba las ganas de seguir culeandome. Cuando las tuve las dos adentro empecé a moverme y eso le ...
... dio permiso a mi pareja a empezar sus movimientos bruscos de nuevo. El Gordo sonrió y me agarró las tetas y me acarició los pezones como había visto que me gusta. Yo empecé a gemir cada vez más fuerte. - Mirá Gordo, mirá que putita mi princesa. Decía el Rodo mientras me culiaba y se mofaba. Yo me fui agachando cada vez más hasta que la cara del Gordo me quedó un centímetro. El Rodo me tenía agarrada de la cintura y me daba cada vez más fuerte y el Gordo me miraba con mucha intensidad. En una de las embestidas no pude más y me saqué la intriga. Le mandé un beso al Gordo que me lo recibió deseoso. Ahí me vine por segunda vez y le grité en la boca mientras nuestras lenguas se entrecruzaban. El Rodo siguió a lo bruto un minuto más y me empezó a llenar el culo de leche. Cuando salió de mi culito usado y se fue a limpiar, el Gordo también me agarró de la cintura y me hizo que lo cabalgue mientras me seguía besando y me susurraba que era hermosa. Cuando le dije: vos también Seba (su verdadero nombre) me enlechó la concha entera. Mañana me iba a tomar una pastilla del día después. Hoy solo quería gozar. Unos meses después, con el Rodo nos separamos. Y quién lo iba a decir, pero ahora estoy de novia con el Gordo, que me cuida y me coge como a una puta reina.