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5 x 1 (capítulo veinte)
Fecha: 10/12/2023, Categorías: Gays Autor: osazo21, Fuente: CuentoRelatos
... mucho. La luz vino y Paco cerró la ventana y el ventilador nos dio un suspiro para dormir. Me desperté cuando sentí el olor a café, Paco estaba en la cocina preparando el desayuno. Nos sentamos a desayunar, Radio Reloj decía sus noticias monótonas, eran como las diez. Habíamos dormido mucho. No habíamos terminado el desayuno cuando el timbre de la puerta sonó y Paco soltó “¡cabrón, sabía que lo iba a hacer!”. Desde la cocina escuché a Tato y a Paco discutir, el tema era pues yo. - ¡Mira, déjame que le dé un poco de rabo! - pedía Tato. - ¡Qué no, que no es una máquina! Hay que darle tiempo a que descanse - repetía Paco- ¡Coño que fuimos cinco! -¿No me digas que no te lo singaste anoche? A otro con ese cuento. - ¡Sí, me lo singué, pa´eso se quedó aquí! - Bueno, ahora estoy aquí... No esperé más y fui a la sala, se callaron cuando entré. - Veo que el ambiente está caldeado. - les dije. - ¡Este que viene y quiere...! - me dijo Paco. - Paco, brother, coño, dame un chance. - ¡Qué no soy yo quién tiene que decidir esto! - ¡Me gustaste mucho, de verdad! ¡Uf, que ni he dormido! - me dijo Tato. - ¡Tú no tienes que hacerlo! ¡Ya hemos quedado para la próxima semana! - casi grito Paco. - Ayer le dimos mucha pinga, tiene que descansar. - ¡No me vengas con ese cuento! Ahora lo ha de tener nuevecito como si nada. - Tato trató de ganar con ese argumento. - ¡Ya, salió el médico! - se burló Paco. -Lo soy, soy médico y lo sé bien. - Pero tú no ...
... eres el que ha dado el culo a cinco bugas. - el enfado de Paco ya era cómico. - A ver, calma, calma. - traté de terciar entre ellos.- Vamos a sentarnos y a conversar. Nos fuimos a la cocina, Paco le dio café a Tato pero ya no parecía tan bravo como antes. Al parecer se le había pasado bien rápido. Tato también sonreía. - Ayer me singaron bastante, bien, me gustó, pero fue mucho, me dejaron el culo como una pomarrosa y entumecido. Tengo que darme un respiro. - expliqué yo con calma. - Pero este anoche te singó, me la corto. - dijo Tato. - Sí, singamos. - le dije sonriente.- pero ya no más, estoy molido. - ¿Y si me la mamas? - pidió Tato que no quería irse así como así. - ¡Coño, pero que pesa´o eres! - le soltó Paco. - ¿A qué no te gusta que te la mame ahora? ¿Ah? - replicó Tato. - ¡Sí, pero lo respeto! No le vamos a destrozar el culo ahora porque queramos singárnoslo. - dijo Paco.- Sí, sí, yo me lo singaría ahora mismo y le dejaría el culo chorreando leche. Tato me miró sonriente, me acarició la mejilla y me besó. Paco me abrazó por la espalda pegándose a mí y besando mi nuca. Me fueron arrastrando hacia la cama y en un abrir y cerrar de ojos estábamos desnudos todos, besándonos, acariciándonos. Paco me tomó por los hombros para decirme: “Lo que hagamos, lo decides tú, hoy mandas tú”. Tato se unió a modo de juramento “Tú decides, tú llevas la batuta ahora”. Comprendí el juego de los dos, estaba claro. Estuve mamado las pingas de los dos, por turno, ...