El maravilloso trasero de Avelina
Fecha: 24/12/2023,
Categorías:
Anal
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... esculturales piernas, durante el camino platicamos, e incliné discretamente la conversación sobre la relación con su novio, me dijo que ya tenía 2 años con él, y que tenían algunos problemas, también me comentó, que tenía la duda, sobre que él tuviera otra novia en Saltillo, ya que su empresa lo mandaba seguido para allá, y ella le había encontrado algunos mensajes con una chica, y que por eso tenía sus dudas al respecto, eso abrió un poco más mis esperanzas sobre poder cogerme a ese monumento de mujer.
Seguimos conversando, y ella me preguntó si era casado, le dije que sí, lo cual, no pareció importarle, me preguntó, en dónde había trabajado y nuestra platica se desarrolló en ese tenor, conversamos sobre temas generales que uno toma para conocerse, y estando por llegar al hotel, nuevamente la plática retorno al novio, diciéndome, que cuando peleaba con él, se quedaba con su mamá, pero le era muy incómodo, porque siempre había bullicio, y que, en muchas ocasiones se salía sola a algún parque, por no tener otro lugar a donde ir a distraerse y desestresarse, no tenía amigos por lo celoso que era el novio, y su mejor amiga trabajaba y ya estaba casada, tenía hijos, así que tampoco la veía seguido.
Cuando llegamos al hotel, ella puso cara de asombro de lo bonito y tranquilo que era el lugar, me estacioné y me bajé para abrir su puerta, cuando ella bajó, tomamos una pequeña banqueta que nos dirigía a la entrada del hotel, caminé junto a ella, pero hay una parte de la ...
... banqueta en dónde se reduce y solo cabe una persona, y como caballero que soy, le cedí el paso para que caminara delante de mí, y no saben el hermoso espectáculo que me quedó a corta vista, era impresionante ver como sus gloriosas nalgas se movían dentro de la falda al caminar, de verdad era algo espectacular, me provoco una erección.
Al entrar al hotel, me di cuenta de que mis intuiciones eran ciertas, había muy poca gente y la mayoría se veían como turistas, quizá había alguna que otra persona local, pero no me conocían, ni yo a ellos, pasamos por el lobby del hotel, y entramos al amplio restaurante donde solo dos mesas estaban ocupadas, escogimos una mesa apartada, y llegando a la mesa le recorrí la silla para que se sentara, lo cual, ella me agradeció con una sonrisa, ya en la mesa, puse mejor atención en las mesas ocupadas, en una de ellas, estaba una familia con niños que pronto se salieron, y en la otra, había 7 u 8 personas, abuelos en su mayoría, así que me sentí tranquilo.
Llegó la mesera entregándonos la carta y ofreciéndonos café, lo cual agradecí, y al retirarse la mesera, me llamó la atención la expresión de Avelina, su rostro expresaba asombro, comodidad, felicidad, su expresión me decía, que esa experiencia era nueva para ella, no conocía muchos bellos lugares que hay en la zona, además, noté que se puso un poco nerviosa por estar fuera de su entorno.
Durante el almuerzo estuvimos platicando ampliamente, pero el tema relevante fue, que ella no estaba segura ...