Los cinco sentidos (cuarto capítulo)
Fecha: 10/01/2024,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: dulceymorboso, Fuente: CuentoRelatos
... joven.
-Buenos días, que tal está?
-Bien y tu? Traes mala cara Tania. Ocurre algo?
-Solo he dormido dos horas.
-Pero como has venido? Deberías haberte quedado a dormir.
-Es que tenia ganas de estar con usted.
Braulio en vez de caminar hacia donde siempre se dirigían, giró y fue hacia la puerta de su jardín. La abrió y con un gesto que no admitía un no por respuesta le indicó que entrara. Entraron en la casa y ella lo siguió hasta la habitación. Ella no sabía que era lo que Braulio quería hacer cuando lo vio abrir un cajón. Había cogido una camiseta y la apoyó en la cama. Se sorprendió cuando Braulio se puso frente a ella y arrodillándose la descalzó con cuidado, una vez descalza se puso de pie y le sacó la camiseta y el sujetador. Lo hacía con mucho cuidado y ella se dejaba hacer. Él vio por un pequeño instante sus pechos que se habían erizado por la situación y a continuación se volvió a arrodillar y le bajó el pantalón y las bragas. Enseguida su coño se mojó al sentir la cara de ese señor tan cerca. Braulio otra vez frente a ella cogió la camiseta de la cama y se la puso.
-Debes dormir un rato jovencita – estaba retirando la ropa de la cama – descansa y te despertaré yo.
Tania no dijo nada, simplemente obedeció y se metió en la cama.
-Gracias – estaba agotada y en seguida se durmió pensando en lo mucho que se había excitado al sentir que ese hombre la desnudaba. Antes de dormirse olió la camiseta y olía a Braulio.
Se despertó al escuchar unos ...
... ruidos, se sentía desconcertada, en donde estaba? Abrió los ojos y vio a Braulio abriendo unos cajones. Enseguida recordó que estaba en la cama de su vecino. Que hora sería? Los días que había estado allí se fijó que había un reloj-despertador en la mesilla de noche y sus ojos lo buscaron viendo que eran las once de la mañana, había dormido tres horas. Se quedó observando a ese hombre. Le gustaba mirarlo, ese señor le hacía sentir tranquila, le daba confianza, seguridad. Era como una figura paternal que siempre te da los mejores consejos y te hace sentir protegida.
Lo observó en silencio. Miró su espalda, en esos momentos hacia calor, durante el sueño había apartado inconscientemente la ropa de la cama y estaba caída a un lado, él estaba solo con un slip puesto que se ceñía a sus nalgas de señor mayor aunque al ser un hombre que hacía ejercicio a diario se veían firmes. Gracias a él había descubierto que se podía disfrutar mucho mirando el cuerpo de un hombre , había comprobado que ser observada podía ser muy excitante, más que muchas caricias. Seria igual de excitante sentir la mirada de un desconocido? Lo que más le tenía desconcertada era que el cuerpo de Braulio era totalmente normal y en cambio le atraía mirarlo. Recordó cuando estaba comiendo con Rodrigo en el jardín y ella no podía evitar mirar disimuladamente el torso desnudo de su vecino.
Le gustaba mirarlo haciendo sus cosas cotidianas, ahora estaba ordenando los cajones, lo hacía en silencio, concentrado en lo ...