Mi zorrita y yo
Fecha: 26/01/2024,
Categorías:
Fantasías Eróticas
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... al instante sin perder tiempo ya estaba con su verga en la boca, definitivamente no iba a durar mucho, ella sabía como mamarla y había aprendido lo mucho que él disfrutaba que se la metiera hasta el fondo. Unos minutos después descargo toda su leche en su boquita, se lo trago todo, lo dejo limpiecito, salieron de su escondite.
-Delicioso, me encanta tu lechita, pero quiero más eh.
-Que putita eres, me encanta.
Lo beso, si que era traviesa, ahora también él tenía su sabor en los labios.
Llegaron a su casa, se metieron sin hacer ruido directo a su cuarto.
-Saludo a mi papá y regreso.
-Ok. No tardes.
Una charla rápido con su padre y se disculpo para ir a bañarse...en sus jugos pensó, y su pene empezó a ponerse a tono otra vez.
Abrió la puerta y ella lo esperaba usando solo la tanguita negra de encaje de la foto.
Se lanzó sobre ella a besarla con excitación.
-¿Cerraste la puerta?
-Creo que sí.
Ella ya le estaba arrancando la playera y pegándose a su cuerpo para sentir su erección cada vez más notoria.
Se quito el pantalón.
Ella se puso en 4 mostrandole ese culito empinado en el que él se iba a perder, acerco su lengua a sus labios, ya estaba muy mojada disfruto de sus jugos por un rato, hasta que ella volteó a verlo con expresión suplicante, pidiendo en silencio que la penetrará.
Le exitaba hacerla esperar, siguio lamiendo sin ...
... reparo. Ella intento moverse, pero él se lo impidió sin dejar de lamer.
Y llego su primer orgasmo, sintió las contracciones de su sexo en su lengua y entonces si, la volteó en la cama para ver su carita de placer, se mordía un dedo para no dejar escapar gemido alguno.
Y sin más empujo su verga en su vagina hasta el fondo, ella mordía más fuerte su dedo y empezó a mover sus caderas para sentirlo más adentro cada vez.
Que rico se mueve la zorrita.
Ambos disfrutaban mucho sus movimientos y sus caras de placer, que rico hubiera sido poder oírla gemir.
Si no paraba se venía, hubo enojo en su cara al sentirse vacia pero él no quería acabar así.
Se acosto en la cama invitandola en silencio a subirse en él, ella entendió y en un instante ya se estaba enterrando su verga despacito hasta el fondo, se quedó inmóvil sintiéndose llena, disfrutando de esa verga en su esplendor; él sentía delicioso sus flujos empapandole el pito, y empezaba a moverse muy rico arriba, abajo, a los lados, como perreando, esta zorrita sabe moverse. Chorreaba y él disfrutaba sentirse mojado de esa manera.
Ella tomo su ritmo y él sabía que venia su orgasmo, él tambien se iba a descargar, llegaron al climax juntos, contrayendo sus cuerpos, disfrutando que su orgasmo apretara su verga ordeñandola por completo.
-Que rico me cojes, papi, quiero más.
Si, ella es muy zorrita. Su zorrita.