Mi sumisa traía regalo (I) - Relatos Eróticos

Mi sumisa traía regalo (I)

... puesto no solo acepto que la llamase perra, si no que ella se considero asi mismo como tal ante mí, y eso no suele pasar tan pronto.

“Estas perdonada PERRA, y si quieres seguir se sincera conmigo, ¿Cuántas veces te has masturbado esta noche?, porque estoy seguro de que lo has hecho”.

La veía escribir, supongo que borrar y volver a escribir, porque tardo un rato en contestar.

“Ha acertado SEÑOR, y me ha dejado sin palabras, pero si le dire que más de seis veces, y aun sigo excitada SEÑOR”.

“Y llevas desde que me has escrito pendiente de si me conectaba o no ¿verdad?”.

“Cierto SEÑOR, hasta a mi madre le ha extrañado porque ella dice que soy la persona más despegada del móvil que conoce”.

“Esta bien PERRA, a mi en parte me pasa lo mismo, ¿qué vas a hacer hoy?”.

“Pues ahora me voy a poner a terminar con la mudanza, colocar mi ropa, y mis cosas, que tampoco son muchas, también si me da tiempo me pondré a ordenar otra de las habitaciones de mis padres que la usare de despacho, a veces hago trabajos de consultoría fuera de mi horario laboral, y esta tarde saldré con mi madre a hacer la compra y tomar un café, y si no le importa le contare que le estoy conociendo, con ellos no tengo secretos”.

“Lo que le quieras contar a tu madre es cosa tuya, yo ya te dije ayer que si estoy contigo lo estoy con todas la consecuencias, aunque no creo que le cuentes que eres sumisa, no querrás que se enteren en tu familia, y al decirme ellos, supongo que también incluyes a ...

... tu padre”.

“A eso me refería SEÑOR, a contarles que he conocido a un Dominante, ya le he dicho que con ellos no tengo secretos, y este paso que he dado, aunque ayer se lo omití a usted, lo he dado en parte aconsejada por mi madre, siempre la he hecho participe de todos mis sentimientos, y ella me ha ayudado mucho, porque, aunque apreciaban a mi ex, los dos tanto mi padre como mi madre me decían que no era lo que yo necesitaba”.

“Me dejas a cuadros, pero me parece bien, pero tienes que saber que, si tus padres saben mi condición, y llegas a ser mi sumisa, yo delante de ellos te tratare como tal, como te dije ayer yo solo te tratare como mi pareja ante quien no sepa que eres mi sumisa, por lo que, si tus padres lo saben, no tendría sentido fingir.”

“Lo se SEÑOR, y si me acepta como su sumisa, entenderé que usted me trate como tal delante de quien sepa que lo soy, y lo aceptare, y espero que ellos también”.

“Me vas a perdonar, pero me has dejado intrigado, llevo más de 30 años en este mundo y es la primera vez que alguien me dice algo asi, ¿Qué edad tienen tus padres?”.

“Entiendo que se extrañe, pero ellos me han educado asi, en que la mejor forma de ser feliz es siendo fiel a uno mismo, y mi padre tiene 60 años y mi madre 57, me tuvo con 17 años”.

“Madre mía, ¿sabes que solo es dos años mayor que yo no?

“Si lo se y espero, bueno estoy segura de que si a mí no me parece un impedimento a ellos tampoco”

“Esta bien PERRA, pero entonces pongo una condición, ...