1. Mi amigo y compañero me hace su putita en un viaje


    Fecha: 29/02/2024, Categorías: Bisexuales Autor: soyAriel, Fuente: CuentoRelatos

    ... alcancé a observar que se acomodaba su verga, me acomodé dándole la espalda para dormir.
    
    Poco a poco me fui durmiendo, en medio de la noche, siento una sensación muy placentera que hizo que despertara, fingí seguir durmiendo, Rodrigo me estaba acariciando el culo, muy suavemente, apenas rozando, intentando no despertarme, me encantaba la sensación y como entre sueños flexioné un poco mi rodilla para darle mejor acceso a mis nalgas, no lo podía creer, mi compañero de trabajo, tan macho y mujeriego estaba acariciando mi culo, me deje hacer, mi bóxer era muy elástico y su mano se metió por debajo y empezó a acariciar mis nalgas, mi respiración se aceleró, pero no me moví, al ver que no despertaba sentí que bajaba mi bóxer hasta el inicio de mis nalgas, uno de sus dedos se aventuró un poco más y recorrió el surco que divide mis nalgas, sentí que presionó suavemente y alcanzó a rozar mi arrugado orificio, tuve que morder mis labios para no gemir y delatarme, todo mi cuerpo se estremeció y rápidamente sacó su dedo, seguramente pensando que había despertado, permanecí quieto, sin moverme, haciendo un ligero ruido al respirar, fingiendo seguir dormido, unos segundos después habiéndose cerciorado que seguía "dormido" sentí nuevamente su dedo, lubricado ahora con algo viscoso y resbaladizo (después supe que era la crema humectante que obsequian los hoteles), acariciaba suavemente los pliegues externos de mi esfínter de una forma riquísima, mordí la almohada para no gemir, después ...
    ... de algunos minutos sentí que presionaba suavemente y la punta de su dedo venció la resistencia de mi esfínter, solamente la puntita, entraba y salía, me encantaba la sensación y arqueé la cintura para ofrecerle el culo, así que se animó y su dedo entró más profundo.
    
    Lo movía divinamente en forma circular rozando mis paredes internas y lubricándome por dentro, seguía mordiendo las sábanas y ahogando mis gemidos.
    
    - ¿Te gusta? -escuché su voz
    
    A estas alturas ya era imposible seguir fingiendo, por lo que dejé de reprimirme y un gemido salió de mi boca.
    
    - mmm, aghhh - fue mi respuesta.
    
    Era obvio que estaba disfrutando su atrevida caricia, y ya sin ninguna precaución me enterró su dedo hasta el fondo, me retorcí de placer, su dedo empezó a acariciar mi próstata y mis gemidos aumentaron de intensidad, se sentía delicioso, movía su dedo de un lado a otro y en forma circular, lo empezó a meter y sacar literalmente cogiéndome el culo con su dedo y me puse boca abajo empinando el culo, con la mano que tenía libre me quitó el bóxer para quedar completamente desnudo, mi culo se contraía y relajaba apretando y liberando su dedo en forma involuntaria.
    
    - Madre mía, que rico culito, me encanta como aprieta mi dedo, se nota que estaba hambriento, de haber sabido que eras putito desde hace años te hubiera cogido.
    
    Mi respuesta fue abrir más mis piernas y empinar todavía más el culo, en señal de entrega absoluta, una de sus manos abrió más mis nalgas y otro dedo lubricado ...
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