Irma, mi dulce niña
Fecha: 29/02/2024,
Categorías:
Hetero
Autor: eedwon, Fuente: CuentoRelatos
... con decisión metí mi mano entre sus piernas y empecé a acariciar su puchita, ella entendió la situación así que abrió un poco más las piernas y se deslizó sobre el asiento, permitiendo tener más espacio para mi mano, por lo que seguí acariciando esa zona, se sentía calientito, pero lástima que no duró mucho, el vehículo detrás de mi auto comenzó a sonar su claxon, señal de que ya era color verde, por lo que puse en marcha.
- Que lástima, apenas estaba entrando en calor – dijo Irma.
- Ni que lo digas, pero igual podemos hacer una parada por aquí cerca y ver cómo nos va.
- No querido, ya estamos cerca de la prepa y ya casi es la hora en que comenzará mi práctica, así que no quiero que me regañen por llegar tarde.
Ella notó mi cara de niño triste por no darle su caramelo.
- Hay corazón, no te pongas así. Mira, si te portas bien, tal vez al término de la práctica podamos hacer algunas cositas…
Mi cara no pudo ser más que de felicidad, con eso me había contentado.
Seguimos con el recorrido y al fin llegamos a su escuela. Entramos al estacionamiento el cual quedaba detrás del edificio de la dirección. Una vez aparcado el vehículo, ambos salimos del auto, pero a mi mente vino el hecho de saber que ella llevaba falda y que no llevaba puesto siquiera alguna lycra.
-Oye Irma, una pregunta, ¿vas a realizar tu práctica así? – señalando con mi dedo hacia su falda.
- Oh, no, cómo crees. En mi maleta traigo una lycra para ponérmela. ¿A caso tienes celos de que ...
... alguien vea lo que traigo debajo de mi falda?
- No, como… como crees, para nada, yo solo decía que- poniéndome un dedo en mi boca, logró silenciarme.
- No te preocupes tontito, que solo soy para ti.
Terminando de decir esto, Irma sacó su maleta del auto, poniéndola en el cofre para después sacar su lycra, colocándose espaldas a mí, y de un movimiento se quitó su falda, la que hizo a un lado con sus tenis. Irma llevaba puesta una tanga de un hilo tan delgado que prácticamente se perdía con totalidad entre sus nalgas. Ella, aún de espaldas, comenzó a ponerse su lycra, inclinando su cuerpo, regalándome una de las mejores vistas, estando así ella inclinada podía ver el bultito de su puchita cubierta solo por un pedazo de tela. Poco a poco Irma fue subiendo su lycra, con movimientos sexys, para culminar con un giro para estar frente a mí.
-¿Qué, te gustó el mini show?
- Me encantó. Sí que sabes cómo provocarme. Mira cómo me has puesto – agarré su mano y la puse sobre mi bulto para que sintiera lo duro que estaba.
- Mmm, corazón- ella comenzó a acariciar mi pene sobre el pantalón – sí que estas “hot”… pero hay que pararle un momentito, no quisiera que se notara lo mojadita que me estoy poniendo.
Fue así que nos dimos un beso que solo duro unos segundos, ambos nos controlamos y decidimos ingresar al gimnasio. Ya estando dentro, ella me dejó encargada su maleta mientras que se reunía con el demás equipo. Justo al encontrarse con sus compañeras, no dejaban de ...