1. Visita Familiar 2: Mi Tía parte 2.


    Fecha: 01/04/2024, Categorías: Incesto Autor: , Fuente: RelatosEróticos

    ... pegué más mi pene a sus nalgas, eso hizo que ella diera un pequeño jadeo.
    
    —La verdad tía que a mí también me gusta estar así contigo
    
    —¿De verdad?
    
    —Claro, para ser sincero, estar así junto a ti me pone más caliente que de costumbre
    
    Hablarle al oído y pegar mi pene a sus glúteos no hacía más que ella jadeara más y más seguido, así que decidí empezar a frotar mi pene contra su derrier, esto la sorprendio por que dio un pequeño gemido, pero aun asi no hizo nada para separarse, mas aun, a los pocos minutos ella empezo a mover su trasero timidamente contra mi pene, asi que llegado a esto decidi hacer mi última jugada, decidí sujetar su mano y llevarla a mi pene, ella se sorprendió, pero no retiro su mano en ningún momento:
    
    —Francisco, ¿que estamos haciendo?
    
    —Que sucede Yesica, acaso no te gusta
    
    —Pero esto está mal
    
    —Entonces por qué no has dejado de frotar tu trasero contra mi pene hasta ahora, sabes lo que has sentido no?
    
    —Este, la verdad, ya no sé ni que decir, yo yo…
    
    —No te preocupes, no tienes que hacer nada, déjamelo a mi
    
    Deje de hablarle al oído y empecé a besar su cuello, ella solo comenzó a gemir de placer, mientras su mano seguía entretenida con mi pene, le desabroche el sostén y se lo quite lentamente, después le baje el calzón y al tocarlo me di cuenta que estaba bastante húmeda, así que decidí que no necesitaba una previa, volví a ponerme detrás de ella la quebré un poquito y con mi mano en mi pene se lo metí lentamente, cada centímetro ...
    ... que iba entrando ella iba gimiendo más y más, hasta que entro todo, una vez dentro empecé a moverme, la sensación era mejor que cuando estaba tomada puesto que ahora ella era consciente y lo estaba permitiendo, mientras la penetraba con suavidad masajeaba sus pechos, apretando sus pezones suavemente.
    
    Decidí ponerla boca abajo, pero sin sacar mi pene en ningún momento, puse mis manos sobre la cama como apoyo y seguí dándole, ella sujeto la almohada y la puso debajo de su rostro, seguro para no escucharla gemir, así que sujete su cabello colocando su cara de costado e hice que me mirara, tenía una mirada tan llena de placer que inmediatamente la bese, y nos quedamos así, besándonos un rato mientras la seguía penetrando:
    
    —Yesica, que rico se siente
    
    —Si Francisco, eres maravilloso
    
    —¿Te gusta cómo te lo hago?
    
    —Sí, me encanta, acaso no lo notas
    
    —Claro que si me doy cuenta, pero quería escucharlo de tus labios
    
    —¿Por qué se siente tan bien?
    
    —Por qué me encanta satisfacer a mi mujer
    
    —Las cosas no podrán volver a ser como eran antes
    
    —Eso no importa, ahora eres mi mujer, ¿está bien?
    
    —Sí, soy tuya, mi amor compláceme, dámelo todo
    
    —¿Lo quieres todo?
    
    —Si, si, si lo deseo
    
    —Entonces pídelo bien
    
    —Por favor Francisco, dámelo todo por favor, lo necesito
    
    Con esta frase empecé a darle más y más duro, la volteé y se lo hice frente a frente, ella puso sus piernas alrededor de mi cintura, me abrazo y mirándome a los ojos me beso, yo también correspondí ...