1. Viaje desafortunado (III)


    Fecha: 28/06/2024, Categorías: Sexo en Grupo Autor: tuarek, Fuente: CuentoRelatos

    ... imágenes paseando por el mar, igual en el de Gaby. Las chicas me habían enviado la información que les pedí, según les explique, les dije que haría mi informe, que me acompañaran la semana siguiente, pero categóricamente Angie me dijo que no podía, que esperaría su recomendación de la empresa y la notificación del bono prometido.
    
    Un viernes, de la semana antes de viajar a entregar el estudio final para la empresa de PC, tocaron a mi puerta y al abrir, la figura de Angie apareció, venia en un vestido azul de una pieza, con un cinturón marcando la cintura, botines rojos de tacón alto, el cabello negro recogido en una cola alta y apenas un collar de cuentas rojas alrededor del cuello; ella se giro hacia mí solo cuando se apoyó detrás de un sofá y tiro su bolso al suelo.
    
    Y no pude más que lanzarme sobre ella, la tome de la cintura y la fui llevando hacia la barra del desayunador.
    
    Le comencé a besar los hombros y deslizar los tirantes del vestido, le gustaba como la tocaba porque ladeaba la cabeza para ofrecerme su cuello y que pudiera ver hacia su escote, sus pechos me fascinaban, si tenían el normal maltrato del tiempo, pero su piel clara, era preciosa, aunque ya habían amamantado, no dejaban de ser unos pechos atractivos, deseables y tentadores.
    
    -Los quiere chupar?
    
    Que más decir que claro que los deseo chupar, se desabotono la blusa y la dejo caer por sus hombros, ahora solo su sostén retenía sus pechos, me senté en el sofá mientras los observaba bien la tome ...
    ... por la cintura y la atraje, metí la cara entre los pechos, sentir su calor, ella tenía una sonrisa de oreja a oreja enseñando los dientes, llevo sus manos a los hombros y comenzó a deslizar los tirantes, yo pasaba las manos bajo su falda, frotando sus muslos carnosos y subiendo hacia sus caderas. Los tirantes resbalaron por sus hombros y llevo una mano hacia mi cara, paso los dedos por mi rostro, yo le bese la palma y chupe el pulgar que me ofreció a la boca.
    
    Entonces dejo caer el sostén y tuve nuevamente sus pechos libres frente a mí, fui directo a un pezón a chuparlo y hundir la cara en la carne cálida y suave, aguantar a quedarme sin aire con el rostro pegado y el parado pezón en mi boca, ella dio un gran suspiro y se le escapo una risa de deleite, yo seguí explorando con las manos bajo la falda, apretando sus nalgas. Jale sus nalgas hacia mí y dio un pequeño chillido cuando perdió el equilibrio y me cayó encima, con el peso de sus pechos asfixiándome con su frondosidad, tome aire en cuanto pude y volví a ocultar la cara entre sus pechos. Se fue acomodando y se apoyó en sus brazos para darme más espacio para respirar, fui subiendo su falda, dejando sus nalgas al aire; entre sus pechos podía ver hacia su ombligo, me acarició la cabeza y acerco su cara a la mía para comernos la boca. Saboreaba sus pezones grandes y marcados.
    
    Estaba ya bien duro y no me di cuenta en cuanto ya me había bajado los pantalones y mi verga, ya le rozaba las nalgas, sus pezones en mi boca y su ...