Mi hermana mi ama (XI) - Relatos Eróticos

Mi hermana mi ama (XI)

Y en ese momento hablo nuestra AMA.

-Fany. -A ver, te lo voy a dejar muy claro, si quieres conservar todo lo que tienes, a partir de ahora mismo, y digo ahora mismo, harás todo lo que te digamos, sin rechistar sin protestar, porque a la primera queja estos documentos se presentaran en el juzgado, y ya sabes lo que significa eso.

Se produjo un momento bastante tenso, en el que Celia no hacía nada más que esperar algo por parte de su hermano, pero este no hacía ni decía nada, al revés se le veía disfrutar.

-Fany. -Mira PUTA, tienes dos minutos para decidirte, si aceptas, ahora mismo vas al baño, te quitas las bragas y las traes en la mano y se las das al MARICON de tu hermano.

Esto la descoloco aún más, pero lo que si es cierto es que se dio cuenta de lo que querían de ella, aunque ella pensaba que solo era follar.

-Celia. -Estáis locos.

Diciendo esto se levantó y…

Así es como termino el relato anterior, que recomiendo leer para mejor entendimiento de esta serie de relatos, siendo este el último relato de esta serie.

Se levanto airada y con malos modos, pero cuando llego a la puerta se dio la vuelta y miro hacia donde estaban el MARICON y nuestra AMA, pero al ver que estos no hicieron ningún gesto por pararla o por decirle algo, se dirigió hacia el baño.

-Maricon. -Ya le dije AMA que esta iba a ser más fácil, pues le gusta demasiado la vida que lleva como para perderla de golpe.

No había terminado de hablar cuando se acercó a la mesa con algo en ...

... las manos que no podía ser otra cosa que la braga, bueno en este caso era un tanga de encaje de color chocolate.

-Celia. -Aquí las tenéis, (esto lo dijo aun con altanería y orgullo), ¿y ahora qué?

Nuestra AMA fue a hablar, pero el MARICON, sin querer o queriendo, se le adelanto.

-Maricon. -Ahora te callas y escuchas lo que te va a decir MI AMA, si, como estas escuchando ella es MI, bueno NUESTRA AMA, y a la más mínima que no obedezcas o simplemente tengas un mal gesto o una mala respuesta hacia ella, te pongo de patitas en la calle a ti y al tonto de tu marido, ¿queda claro?

Esta vez sí que agacho la cabeza y asintió, aunque se vio aflorar una pequeña lagrima

-Fany. -Te lo iba a decir yo, pero se me ha adelantado el MARICON, de tu hermano, en otro momento me hubiese enfadado por no dejarme hablar a mí o hablar sin mi permiso, pero creo que lo que te ha dicho está muy bien expresado. Te vas a convertir en una más de mis esclavas, vas a hacer todo lo que a mí me apetezca con quien a mí me apetezca y donde a mí me apetezca, y siempre me llamaras por SEÑORA, AMA O DUEÑA, y jamás sin mi consentimiento expreso me tutearas, a no ser que haya alguien extraño y no sepa que solo eres una PUTA GUARRA, MI PUTA GUARRA, ¿queda claro PERRA?

-Celia. -Si SEÑORA, queda claro.

Esto lo dijo mirando a su hermano con desprecio y odio, pero totalmente resignada a que si quería que su vida fuese como hasta ahora solo le quedaba aceptar esa situación.

-Fany. -seguirás siempre ...