Dulce panochita maya
Fecha: 30/08/2024,
Categorías:
Sexo Interracial
Autor: Amotepili, Fuente: CuentoRelatos
... gran cantidad de mi semen y se medio ahoga, pero la promesa de los 100 dólares es tentadora, y no deja caer ni una gota de mi leche, que se va tragando ruidosamente en cada pulsión que sale de mis bolas, y le digo que me mame la cabeza de la verga ¡Solo chúpate la cabeza india puta!!!, ¡Sólo la cabeza de mi verga!!! ¡Qué divino me mamas la pinga mi puta bella!!! Hasta que ya no queda semen, sino la polla palpitando con la excitación de que esta chica me ha complacido en lo que me gusta más del sexo, que es que se traguen mi leche.
Lupita me muestra el interior de la boca y su lengua, donde no quedan restos de semen, y pregunta qué si me gustó, a lo que la arrastro hacia mí, y sonriente, después de darle las gracias, le doy un largo beso, asegurándole que es una “artista de la mamada”, ella un poco cortada se escabulle al baño y se pone a hacer gárgaras con el enjuague bucal y cuando me acerco, la veo enjugando una lágrima, y le pregunto qué le pasa, y me responde que le da pena, porque voy a pensar que es una puta y con fuerte acento mexicano me explica que ella nunca se “había comido los mecos”, mientras la siento en mis piernas y la tranquilizo diciéndole que no creo que ella sea prostituta porque le esté dando plata por pasar el tiempo conmigo, pero que me ha encantado coger con ella, pero me ataja respondiéndome que no hemos cogido sino que ella solo me ha chupado la polla, a lo que le aseguro que más tarde le voy a meter la verga “por donde me deje”.
Eso parece ...
... que la tranquiliza un poco, y me pregunta si tengo una escobilla dental, y le doy la del hotel, para después de cepillar sus dientes tan blancos como coco rallado, la traigo cargada de vuelta a la cama, en la que se sirve otro trago con hielo y se pone a ver la porno que está pasando en la tele, mientras un rato después, más goloso que curioso, me pongo a explorar el cuerpo femenino más bello y perfecto que he tenido a mi disposición para follarme; el cabello de Lupita es absolutamente negro, ni una cana, muy brillante, trenzado en una crineja que queda colgando coquetamente en su hombro izquierdo, su vientre absolutamente plano, su piel es morena clara y allí donde le da la luz, riela firme y joven, su nariz es curva y pequeña, sus labios morenos y muy carnosos y aprovecho para darle un largo beso para probar su lengua curiosa, después comenzar a tocar, lamer y besar sus dos bellas –aunque pequeñas- tetas, que parecen mitades de una manzana, coronadas con un par de pezones muy redondos, muy oscuros y de sabor dulce, a lo que me replica “me puse melado de caña” porque así le gusta a los vatos, lo que le agradecí porque me encantó ese detalle.
Después de estar disfrutando de sus tetas y darnos unos besos de lengua, comencé a bajar desde sus pechos para verle su panocha, a la que no podía dejar de “atender”, pero ella me lo impedía, desviando mi cabeza o su cuerpo, hasta que ya un poco enfadado le dije que se dejara de pendejadas y pregunté porque no me dejaba comerle el ...