Pamela - Relatos Eróticos

Pamela

... cosas

-Hola Don Pedro, me acerque y también me puse de puntitas para darle un beso.

-Hola chiquis, ¿Cómo esta Raúl? (mi papá)

-Muy bien Don Pedro, gracias por preguntar

Al otro personaje solo le estire mi mano

Nos esperaba una comida deliciosa como siempre en la casa de Ale, la pasamos súper bien, tuve mucha suerte con mis amigas. Por la tarde nos convenció Don Pedro que nos metiéramos a la alberca, no fue muy difícil la verdad.

-Vente a mi cuarto te presto un traje, el rojo se te ve muy lindo me dijo Ale.

-El rojo ya es mio we, no lo uses más jajajajajajaaja

Ale se metió a su vestidor mientras yo jugaba con mi celular

-Vente we, toma el traje, esta aquí me grito Ale.

Me levante aventando mi celular en la cama y sentí que alguien estaba afuera de la recamara, pero no le di importancia, en su casa como en la mía siempre hay muchas personas.

Todo estaba tirado en el piso, ropa bolsas un vestidor desastroso

-Hay no inventes Alejandra, ¿Qué onda? ¿Paso un tornado por aquí?

-¡Cálmate! Tu recamara esta igual jajajaja, haber ponte esto y cállate

Me desnude aprisa y acomode mi pants y short sobre una gaveta en el centro del vestidor, y para mi sorpresa…

-¡Oye ya no me queda, me aprieta, soy una gorda!

-jajajaja, no inventes chiquis, te crecieron las nalgas, deja de tragar tanto jajajajajaja

-¡No lo puedo creer! ¿Tienes otro?

Una voz muy masculina y grave nos interrumpió de pronto

-Se te ve muy bien niña, yo que tu me lo ...

... dejaba

Estaba dentro de la recamara el tal Eugenio, ¿Cómo alguien tan grande entraba sin ser visto?

-¿Le parece? Me gire un poquito y trate de ver mi trasero que estaba por salirse del bikini

-¡O si! Créeme, esta muy bien para una niña de tu edad.

Honestamente me sentí muy apenada y ruborizada

Tan rápido como sucedía todo a Ale se le desorbitaron los ojos y me hizo un gesto para que viera lo que ella estaba mirando de reojo

Era un bulto que tenia el panda gigante en el inicio de su pierna, era algo como una lata de refresco, pero dentro de su pantalón gris.

No sé que cara puse pero seguro fue de sorpresa

-¡Salte Eugenio! Le dijo Ale mientras lo empujaba con sus dos manos como si tratara de mover un refrigerador. – ¡ya yame voy! dijo el gigantón riendo.

¡Blam! Cerró la puerta y se quedo recargada tapándose con una mano la boca y se rio sin voz

-¿Viste chiquis? No inventes

-Si, pero… ¿tu crees que sea?

-Obvio bruta, era su paquete, y es tan grande como el

- Wow pinche Ale, ¿ya se lo habías visto antes?

-No, creo que tu lo pusiste así con el bikini rojo jajajajajareía ya a toda voz.

-Hay que miedo we, ¿que tal si nos hace algo?

-No juegues chiquis, lo conozco hace tiempo y es buena onda el Eugenio jajajajaja

Me encogí de hombros y sonreí…

Salimos de su habitación y reíamos con cierto morbo de la escena con Eugenio; ya en la alberca nadamos y nos atascamos de botana, también escuchábamos músicasentadas en unos banquitos que están ...