Más sexo con Luli, Ema, Fede y yo (parte 8)
Fecha: 13/09/2024,
Categorías:
Intercambios
Autor: Dayenorius1, Fuente: CuentoRelatos
Tras relajarnos un rato largo en el jacuzzi los cuatro, mi novia Luli, nuestro semental Fede, el bailarín invitado sorpresa Emanuel y yo, besándonos entre los cuatro alternativamente, con caricias, pajas y morreos, salimos para secarnos y comer las empandas que tuvimos que volver a calentar en un horno eléctrico. Nos sentamos a la mesa envueltos en toallones y batas, Fede y yo de un lado y Luli con Ema del otro lado, bien juntos, para dar cuenta rápidamente de la comida y las cervezas.
Por la actitud de mi novia y cierto asombro de Emanuel, supuse que algo estaba pasando al otro lado de la mesa. Ella me lanzaba besos al aire entre bocado y trago, pero con la otra mano había empezado a sobarle los huevos y la pija a su nuevo partenaire. Apenas habíamos terminado de cenar, cuando mi novia abrió su bata para mostrar sus pechos con los pezones erectos otra vez, le tomó la mano izquierda al bailarín para que se los acariciara y le giró la cara para besarlo lujuriosamente. El bailarín empezó a sobar y apretar los pechos de Luli y con Fede nos excitamos de nuevo, pajeándonos mutuamente y darnos varios morreos.
Mi novia se levantó de la mesa y se llevó a Emanuel de la mano hasta un amplio sillón, quitándole la toalla en el camino para ir acariciándole el culo. Puso las toallas sobre el sillón, se besó con mucha pasión con el bailarín y lo depositó sobre ellas, para enseguida sentarse a horcajadas sobre sus piernas y lentamente meterse la pija erecta del joven dentro de su ...
... vagina insaciable hasta el fondo. Lo abrazó, lo chuponeó a lengüetazos y comenzó a menearse muy despacio sobre las piernas de Emanuel, deleitándose con gemidos y jadeos del miembro de su nuevo amante, mirándolo a los ojos como si fuese su primer amor.
El chico le chupaba las tetas con furor, la aferraba de las nalgas para apretarla más contra su cuerpo y levantaba sus caderas para hundir más su poronga en el interior de la concha de mi novia. La escena nos puso como dos motos a Fede y a mí, que nos besábamos, acariciábamos y pajeábamos como dos adolescentes súper calientes. Como pudimos, nos levantamos para acercarnos al sillón de los amantes y sentarnos al lado de ellos para no perdernos detalles de la desenfrenada cogida que se estaban dando.
Ni nos prestaban atención, obviamente, y se estaban dando para el campeonato, cuando imité a Luli y me senté a horcajadas de Fede para meterme su pija en el culo. Él la sostenía y la guiaba hacia mi ano con una mano y con la otra me abría los cantos, mientras yo descendía lentamente hasta sentir como su glande entraba con facilidad en mi interior y me hundía el tronco hasta el fondo, arrancándome un largo suspiro de placer y haciéndome contraer y dilatar repetidas veces el ano para sentirla más y gozármela entera.
Nos quedamos quietos un par de minutos mirándonos a los ojos al tiempo que a nuestro lado se oían los resoplidos, jadeos, gemidos y gritos de mi novia y de Emanuel que cogían desesperadamente, como un tren sin freno. Le ...