Mi novia por entrar al BDSM logró perder mi amor
Fecha: 10/10/2024,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: MikeFed, Fuente: CuentoRelatos
... todo.
La acosté boca arriba, puse sus piernas sobre los soportes y ella gemía. Ajuste las cintas, fui a su lado y espose sus manos a la camilla. Con una soga, inmovilice el torso.
—Comencemos. Dije.
Nuevamente con la fusta, recorrí su cuerpo. Golpeaba suavemente, Tina gemía. Llevé la fusta a su concha, que como estaba totalmente abierta de piernas podía jugar con su clítoris. Lo golpee y ella se estremeció. Otro golpe y pedía más. Tome de una mesa el estimulador de clítoris y lo prendí ya apoyado.
Tina se retorcía de placer, gemía como loca. Me puse junto a su cabeza, y apoye mi pija en sus labios. Ella con desesperación comenzó a chupar. Nuevos orgasmos estremecían su cuerpo, no dejaba de chupar, al contrario.
Así estuvimos un rato, hasta que me corrí de su lado, y me puse entre sus piernas. En un solo movimiento la penetre hasta el fondo. Y seguí jugando con el estimulador en su clítoris. Ella gritaba de placer y yo podía sentir en mi pija las contracciones de su concha en cada orgasmo. Era increíble como gozaba sin parar.
Sentir como gozaba, tenerla toda abierta para mí hicieron que me excite con todo y acabe en su concha, llenándola de leche.
Ella tuvo un orgasmo gigantesco, salí de su concha, le di un beso en los labios y puse mi pija en su boca para que la limpie.
—Ahora vengo, no te vayas. Dije sarcásticamente.
Fui a la cocina, tome una botella de agua, y me senté en el living a tomarla. La dejé sola, en silencio y en la oscuridad ...
... total.
Del congelador saque dos cubitos de hielo y fui nuevamente al cuarto. Metí dos dedos en su concha y estaba hirviendo.
—Está hirviendo, te va a hacer mal. Dije.
—Estoy súper caliente Tato.
—Bueno, bajemos un poco la temperatura. Dije le puse su tanga en la boca y metí los dos cubitos de hielo en su concha.
A pesar de la tanga, se escuchaba su grito. Dejé que se derritieran y para ayudar, puse nuevamente a funcionar el estimulador. Tina se estremecía, trataba de mover sus caderas, gritaba sin poder hacerlo.
—Lo bueno de esto, es que yo también puedo divertirme. Dije.
Puse el estimulador sobre uno de sus pechos, mientras yo chupaba el pezón del otro y mis dedos jugaban con su clítoris. Saque el plug anal, y metí dos dedos en su concha, y estimulaba su punto G. Con otros dos dedos, jugué con su ano y fui metiéndolos. Ella estaba super excitada nuevamente, su concha bañaba su orto, haciendo más fácil la dilatación.
—Listo. Dije y le saque la tanga de la boca.
—No, por favor, no pares estoy muy caliente, muy loca.
—¿Seguro? ¿Vos estas segura de querer seguir?
—Si, te pido por favor.
Me corrí y fui a buscar la maquina con el pene mecánico. Lo acerque lentamente y la penetro solo un poco en su concha para que cuando se empiece a mover la penetre casi totalmente. A pesar de la tanga pude escuchar su gemido. Tome el estimulador y lo puse sobre su clítoris, y lo fije con cinta adhesiva. Lo prendí al mismo tiempo que la máquina.
Me puse al lado de Tina ...