Mi primera infidelidad: Un trío y hasta por el culo
Fecha: 18/11/2024,
Categorías:
Infidelidad
Autor: MikeFed, Fuente: CuentoRelatos
Y los dos se empezaron a mover con todo, haciéndome tener mil y un orgasmos, hasta que de pronto, Julián acabó en mi culo, llenándome de leche. Se paró y mientras yo lo cabalgaba a Marcelo, me puso su pija en la boca para que la chupe, cosa que hice y la limpie por completo. Cuando terminé, sentí como Marcelo me llenaba de leche la concha, provocándome otro orgasmo bestial. Me corrí y también le chupé la pija, dejándosela impecable.
Con Walter, mi marido desde hace 5 años, tenemos una buena vida, los dos con buenos empleos, una linda casa y por ahora, no planeamos tener chicos. Yo tengo 25 años, y Walter hasta que pasó lo que les voy a contar, era el único con quien había estado. Soy linda, tengo muy buen cuerpo, y me encantaba disfrutarlo junto a él. En la cama, no nos poníamos límites, sexo oral, vaginal, anal, cogidas de boca. El según comprobaría después tiene un pene normal, de unos 15 cm.
Una noche, después del sexo, mirábamos un video porno, donde una mina estaba con dos tipos, con unas pijas grandes… gruesas… y la cogían por todos lados. Cuando me preguntó si me gustaría hacer algo así, le dije que no… pero mentí… y estaba completamente mojada.
Yo trabajo en una inmobiliaria que se dedica a propiedades de alto valor, mansiones, pent-houses, quintas de alto nivel, en la zona norte de Buenos Aires. Una mañana llaman por una mansión en Tigre. Una propiedad de tres millones de dólares. Era un hombre que yo calculaba por la voz era de unos 40 años. Quedamos ...
... que la mañana siguiente nos encontraríamos y se la mostraría. Me dijo su nombre, Julián y me aclaró un par de veces que iría con la mujer.
Yo los esperé en la puerta y vi que llegaron en un auto alemán de muy alta gama. Del auto bajó él de unos 45 años, muy elegante, atractivo por cierto y una mujer de unos 30 años. La mujer era realmente asquerosa, evidentemente una nueva rica… En un momento, yo le mostraba la cochera a él y me dijo:
-Sonia, perdona los modos de mi mujer… se pone así cuando siente que otra mujer… vos me entendes.
-No hay problema. Dije.
Finalmente compraron la casa, en la negociación entramos en confianza y él me recomendó a un par de amigos. Cuando lo hacía, siempre me avisaba por teléfono. Un día me llamo y me dijo:
-Sonia, necesitamos con un amigo de tus servicios como vendedora, pero… con mucha discreción…
-Entiendo Julián, ¿cómo queres hacer?
-Si estás de acuerdo, te espero mañana en mi empresa, y charlamos.
Al día siguiente fui a la empresa y de inmediato me hicieron pasar a su oficina. Estaba con otro hombre, muy bien parecido, muy elegante y con una sonrisa tremenda.
-Sonia, te presento a Marcelo, mi amigo.
-Un gusto Marcelo. Dije y el me estrecho la mano pero se acercó y me dio un beso en la mejilla, cosa que me sorprendió.
-Sonia, con Marcelo queremos hacer una inversión, a través de una sociedad, y como te dije, necesitamos mucha, mucha discreción…
-Julián, no hay problema, no es el primer cliente que me pide ...