Jorge Luis, su hermano y yo (IV): La erección matutina
Fecha: 29/11/2024,
Categorías:
Gays
Autor: PackGay85, Fuente: CuentoRelatos
... y saca mientras jugueteaba con su lengua y sus manos agarraban mis nalgas para darle fuerza a la mamada que me estaba dando, mientras subía y bajaba por mi verga ya completamente erecta, apretaba sus labios suavemente alrededor de ella y de vez en cuando llegaba a la cabeza y se la sacaba para llenar mi cabeza de su saliva, yo estaba en la gloria. Después bajaba a mis huevos y los separaba con su lengua y se los metía a la boca, bajaba un poco más y llegaba a mi pirineo, las sensaciones me tenían al borde del orgasmo.
Entre suspiros le dije, estoy por correrme, se metió mi verga a su boca y empezó a jugar con su lengua dentro de ella, lo que mi hizo soltar 4 chorros de semen caliente en su boca, se levantó y me dio un beso en el que intercambiamos mi corrida.
-Es hora de que tu hagas tu ejercicio mañanero me dijo- empezó a empujar mi cabeza hacia abajo hasta que estuve frente a su deliciosa verga de 17 cm, llena de venas, pues no se había bajado su erección al contario, después del oral que me había hecho y de correrme en su boca estaba más llena de venas y mucho más dura, con una cabeza brillante por el precum que empezaba a escupir.
Cuando chupé su cabeza pude sentir el delicioso aroma matinal de la verga de Jorge: Las corridas de la noche anterior, la orina de hace un momento, el sudor por la noche calurosa que pasamos y el líquido seminal que ya empezaba a escurrir de su cabeza, esa combinación encendió un fuego dentro de mí.
Sin pensarlo más me llevé ...
... el mástil a la boca y empecé a jugar con mi lengua en aquel glande que ya estaba brilloso, recogí el líquido seminal con mi lengua y empecé a descender por su tronco siguiendo cada una de las venas que ya estaba marcada, hasta llegar a aquellos deliciosos y peludos huevos que me ponían como loco. Sin pensarlo dos veces, los campaneé con mi lengua pudiendo sentir el sabor a sudor, tan delicioso que me hizo llevarlos a mi boca primero uno y luego el otro, después los levanté suavemente con mi mano para abrirme paso hacía su pirineo y poder chuparlo y besarlo como él lo había hecho conmigo.
Volví a subir por toda su verga hasta llegar a su cabeza, antes de metérmela levanté la vista y le dije- cógeme por la boca- y me dispuse a metérmela, Jorge solo lanzó una risa maliciosa y agarró ambos lados de mi cabeza y empezó a meter y sacar su verga, podía sentir como sus huevos chocaban con mi mentón y como la punta de su verga llegaba al fondo de mi boca provocándome arcadas. Logré controlarlas respirando con la nariz, lo que me permitía aspirar su delicioso y embriagante aroma, me estuvo cogiendo como por 5 minutos cuando sentí que metió su verga hasta la mitad, apretó mi cabeza por detrás suavemente y soltó sus 5 chorros de semen caliente en mi boca, me levantó y nos fundimos lentamente un beso en el que ahora intercambiamos su leche.
-hay que bañarnos- dijo Jorge mientras prendía la regadera. Aquel baño y la corrida nos hizo despertar. Durante aquella ducha no pasó nada ...