Adiestrando a mi pet Girls - Relatos Eróticos

Adiestrando a mi pet Girls

Les cuento que hace un tiempito salgo con una mujer de 46 años que se había divorciado hace mas de 3 años, ya hemos tenido algunos encuentro sexuales con dominación, por lo cual estábamos muy contenta una con la otra, para los que no me conocen son Nati y mi supuesta novia se llama Florencia, pero yo le digo Flora, ella acepta muy bien el grado de sumisa y se esmera en poder complacerme, si bien nunca tuvo hijos, era la sumisa de su marido pero no de la misma forma que nuestros encuentros.

Tenia que viajar al interior del país a una pequeña ciudad rodeada de montañas y cerros, un lugar maravilloso, le propuse si quería venir y nos tomabamos unos días de vacaciones y yo aprovechaba también el tema del trabajo, ella acepto de buen agrado, ya que pasaría por lo menos una semana conmigo, lo que no sabia era lo que le esperaba.

Miraba por internet unos lindos complejos de cabañas hasta que encontré una que tenia cabañas separadas y bastante dispersa una de otra, esa era la ideal, después de mirar me puse a buscar pelis pornos de dominación, siempre saco alguna idea de ellas, hasta que una me llamo la atención, mi imaginación comenzó a correr a mil kilómetros por hora, al dia siguiente comencé a buscar los elementos para llevarlos en el viaje, cuando solo faltaba dos días para el viaje ya tenia casi todo listo, le avise que lo noche siguiente viniera a mi casa que trajera su bolso y se quedara a dormir en mi casa asi podríamos salir temprano.

Eran las 5 de la mañana la ...

... desperté y como siempre que se quedaba en mi casa dormía desnuda, como era fines de octubre y el clima es templado y durante el dia esta calido, nos aprontamos, ella esperaba que le diera que ropa debería usar, pero antes le puse sus adornos, una pinzas con una bolas de siliconas abrochadas a cada uno de sus labios vaginales, como siempre cuando salía conmigo no usaba ropa interior, le di un vestido de pique celeste ajustado al cuerpo, sus zapatillas, y le permiti usar una caperita de jeans porque a esa hora esta fresco, cargamos todo en el auto y empredimos el gran viaje, de vez en cuando en el camino metia mi mano entre sus piernas y solo parábamos para ir al baño y cargar nafta, paramos para almorzar y que hiciera todas sus necesidades ya que no pararíamos hasta llegar, que faltaban aproximadamente 2 horas.

Al fin llegamos pase por la administración pedi la cabaña que estuviera mas alejada ya que nos molestaba mucho el ruido, pero no era por eso sino que quería privacidad para realizar mi juego, nos dieron la ultima cabaña, por la cual se ingresaba al living y la cocina y afuera tenia una terracita con una parrilla y un par de reposeras, estaba rodeada de arboles, debajo ya que el terreno esta en pendiente, estaba el baño y el dormitorio, con un ventanal enorme que daba a la cochera privada, como era de esperar la cabaña estaba rodeada de plantas y arboles frondosos, era muy difícil ver a cualquier lado desde abajo.

Nos acomodamos y deje un bolso apartado donde tenia ...