1. Mi historia con una mujer maltratada (1)


    Fecha: 16/12/2024, Categorías: Hetero Autor: Tmy456, Fuente: CuentoRelatos

    ... mejor manera de descargarse". "No sé porqué me pasa esto". Anen había perdido a sus padres a los 19 años en un accidente de auto, como dato. Me indignó bastante que la gente pasara por al lado nuestro y no preguntara qué pasaba, ni se acercara, ni nada. Cuando terminó de llorar, que habrán pasado unos 30 minutos me pidió por favor que la llevara hasta su casa, obedecí. Yo siempre la había acompañado hasta el túnel y rara vez hasta las vías. Todo esto era muy extraño y nuevo para mí. Llegamos a su departamento, lo primero que hice fue buscar en su riñonera las llaves, abrí y accedimos. Subimos cinco pisos de escaleras, hasta llegar a la puerta de su departamento. Trataba de meter las llaves, pero para ella era como hacer entrar el hilo en una aguja, le temblaba muchísimo todo el cuerpo. La ayudé a abrir la puerta, por sí misma no podía. Me indicó adonde estaba su pieza, fui y la recosté en la cama, se estaba muriendo del dolor.
    
    —¿Cómo pasó?
    
    —Estaba saliendo de acá para ir a la clase de Funcional cuando este hijo de puta me agarró del cuello y me pegó tres veces acá.
    
    Me señaló su abdomen.
    
    —¿Alguien más lo vio?
    
    —No había nadie en la calle.
    
    —Dejame ver.
    
    —No te va a gustar.
    
    —No me importa.
    
    En ese mismo momento se levantó la remera y pude ver que su hermoso abdomen estaba todo moretoneado.
    
    —La concha de la lora, boluda...
    
    —Te dije que no te iba a gustar.
    
    —¡¿Hay que llamar a una ambulancia?!
    
    —¡¡No!!
    
    —¡Miráte cómo estás!
    
    —No boludo, esto ...
    ... con un ibuprofeno se me pasa.
    
    —¡¡¡Lo voy a re cagar a trompadas!!!
    
    —No digas boludeces.
    
    —¿Qué boludeces?
    
    —¿Y si está enfierrado?
    
    —No me importa...
    
    —Yo sé que podés estar caliente, pero tranquilizate y traéme un paracetamol de la caja de medicamentos.
    
    Le hice caso y le llevé un vaso de agua.
    
    —Escuchame, a mí cualquier cosa, me llamás y estoy acá.
    
    —Ok.
    
    —Chau Anen.
    
    —Chau Tommy.
    
    {A la medianoche}
    
    Mensaje de texto:
    
    —Boludo, vení a mi casa, me estoy muriendo del dolor.
    
    —Yendo.
    
    Llegué más o menos a la 1:00 (entre que me preparé y salí), son más o menos 20 cuadras, no había un alma en la calle. Cuando llegué, toqué timbre y bajó para abrirme la puerta. Estaba demacrada: pálida y con ojeras. Tenía un camisón gris, unos pantalones de pijama y unas pantuflas. Le pregunté como estaba y me dijo: "pasá". Subimos por ascensor y ni bien entramos a su casa le comenté que yo iba a estar en el sillón viendo una película. Me preguntó si la podía ver conmigo, le dije que sí. Nos quedamos viendo la película, que no me acuerdo bien de qué se trataba, pero era de amor, ella la eligió. Comenzó a abrazarme, apoyó su cabeza en mi hombro, me pareció raro, pero acepté el abrazo. Cuando terminó la película, apagué el televisor y ella apoyó su cabeza en mis piernas, subió las suyas al sillón y nos quedamos así unos minutos. Yo entendía en cierta medida por qué estaba mimosa. Pero llegó un momento en que me pidió algo que me desconcertó, que le diera un beso. ...