V. El desenlace de una amistad de 20 años - Relatos Eróticos

V. El desenlace de una amistad de 20 años

... cabeza contra la almohada, la imagen de ella ofreciéndome su cuerpo me envenenaba puse mis dos manos en sus hombros y las deslice por toda su espalda pase a su pecho y apreté sus pezones, ella gimió, sujete sus muñecas y jale sus brazos hacía atrás para poder embestirla con fuerza, mi amiga, mi confidente, mi compañera, se rindió ante mi se dejó poseer por mi así que yo no la iba a decepcionar, solté sus brazos retome sus caderas, saque completamente mi miembro y embestí de un solo golpe en varias ocasiones, era demasiado el tiempo que estábamos solo y nuestros amigos podía sospechar por lo que tuvimos que acelerar nuestros juegos.

V se volteó boca arriba levanto y junto sus piernas, de tal manera que tomé ambos tobillos y pude ver la maravillosa postal de sus piernas extendidas hacia arriba bajando hasta unas redondeadas caderas adornadas por una pequeña y húmeda vagina, V sujeto ambos lados de la almohada me miro a los ojos pidiéndome lo que quería que hiciera sin decir una palabra. La embestí de un golpe y comencé a moverme adentro afuera mientras sostenía sus tobillos y poco a poco me incline sobre ella coloque sus piernas en mis hombros y sostuve sus muñecas contra la cama en esa posición comencé el martilleo para terminar nuestro encuentro, con cada golpe mi sexo chocaba con el suyo y me dejaba sentir su humedad en mi pubis y en mis testículos, acerque mi cara a la suya y pude besar esa pequeña y bella boquita que siempre me enamoró, le di un mordisco en su labio ...

... inferior y acelerando un poco las embestidas, ellas exhalo un suspiro entre cortado, -Ya, ya, yaa- Yo no pude articular alguna frase coherente, salió de mi algo así como un sonido gutural desde el fondo de la garganta, intentando ahogar el placer que sentía.

Ella se vino y escurrió por su vagina y nalgas y yo me descargue y vaya que lo hice, esa cantidad de semen fue el producto de años de deseo, sentí como si mi alma quedará dentro de ella una, dos, tres no sé cuántas veces, perdí la cuenta de los chorros con los que llene a mi bella amiga, poco a poco mis músculos se relajaron ella abrió sus piernas y me permitió descansar sobre su pecho aún con mi pene dentro de ella -Años deseándolo y ni así me imagine lo increíble que eres- es lo que pude decirle después de que pude recuperar el aire y ella siendo quien era contesto con la candidez y socarroneria de toda la vida - Jajaja menso, yo soy increíble como sea-

Sonrió, sonreí, nos besamos en un tranquilo pero intenso beso, salí de su cuerpo, nos aseamos y bajamos a escondidas para que nadie se diera cuenta de lo que acababa de pasar, mis piernas temblaban al caminar y me di cuenta que las piernas de V también temblaban, eso para mi era un halago sin palabras, nos dimos un brazo y un último y cariñoso beso para después separarnos y mezclarnos cada quien por su lado en la fiesta, satisfechos, eufóricos y extremadamente relajados.

V si lees esto quiero que sepas que estaré esperando pacientemente la ocasión de encontrarnos ...