Noelia una sumisa no tan asexual (IV)
Fecha: 05/01/2025,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: sireleo, Fuente: CuentoRelatos
... era mi intención que pasara nada y se estropeara todo.
Se sentó a mi lado y entro Mercedes con unas tapas frías, venia acalorada, pero se le notaban los pezones tiesos.
Estuvimos hablando y recordando viejos tiempo, hablando de sus hijos, de los nietos que tiene, lo normal.
Solo que yo no dejaba de tocar a mi perra, discretamente, pero no tanto como para que Mercedes no se diera cuenta, lo que hacía que se removiera en la silla bastante, tanto que hasta su hija le pregunto que si le pasaba algo.
Comimos muy bien y yo las deje en la mesa terminando el café y yo quite la mesa, puse el lavavajillas y llame a Noe.
- ¿dime?
-dile a tu madre que vas a echar la siesta, cierra la puerta y te quiero a cuatro patas perra, desnuda, tengo ganas de follarte ese culo, porque entre lo buena que estas y las tetas de tu madre, no se me ha bajado la calentura.
Se le ilumino la cara, porque ella estaba aún peor, pues ya me había encargado yo de tenerla encendida.
-mama, voy a echarme la siesta, que estoy muerta.
Yo me asome…
-Mercedes que vas a hacer tú, yo también voy a echarme un rato.
-si yo también, recojo las tazas y me echo un rato.
Y aunque no era mi intención, sí que quería que Mercedes viera a su hija disfrutar, asi que cuando entre ella estaba tal y como le había ordenado, eso si la habitación estaba en penumbra, cerré la puerta, y como no quería que ella se diera cuenta, porque pensaba dejar la puerta abierta y de tal forma que a través del espejo ...
... pudiese yo ver la reacción de Mercedes, saque el antifaz de la bolsa.
Se lo puse, y la coloque como yo deseaba, y sabiendo que estaba totalmente cegada, volví a abrir la puerta con la esperanza de que Mercedes no hubiese entrado en su cuarto.
Tuve suerte, pues aún se le oía trastear en la cocina, y para llegar a los dormitorios antes tenía que pasar por la puerta que separaba estos del comedor.
Me quité el bañador y me puse tras mi perra.
-de ti depende de que se entere tu madre lo guarra que eres.
Y se la metí de golpe, era increible, estaba chorreando, la muy puta estaba excitadísima, pero aguanto el envite, solo suspiraba y gemía flojo, eso sí agarrada a una almohada para aguantar.
Mientras la enculaba, no hacía más que mirar el espejo de reojo, y ya estaba a punto de desistir, de dejarme llevar y correrme, después de sentir como mi perra se había corrido ya dos veces, y por lo bajo, pidiéndome que me corriera, que me quería sentir dentro, la vi, y aunque se puso la mano en la boca no hizo por retirarse, pero eso me obligo a hacer un esfuerzo, por lo que para no correrme me salí, lo que propicio que mi perra hablase.
-no ufff, señor, no me castigue asi por favorrr.
A través del espejo, vi la cara que puso al oír a su hija, pero también como metió una mano bajo la camisola y la llevo a su coño, y la otra la dedico a pellizcarse los pezones por encima del vestido.
Se creía segura, porque si no llega a ser por el espejo, no se le podía ver, pero yo ...