El día siguiente
Fecha: 17/01/2025,
Categorías:
Incesto
Autor: Lostlostlost, Fuente: CuentoRelatos
... frotarse en el de forma rítmica, lo que podríamos llamar “fallar” o “caldear” aquí en Mexico. Fui hacia su cuello, besándolo mientras escuchaba ruidos de placer de su parte, siempre cuidando no dejar rastros, es decir un chupeton, una de mis manos quitaron el botón de sus jeans, y al poco tiempo ella ayudó a quitárselos completamente, dijo adios a su blusa al instante siguiente, llevaba puesto un bikini negro con esa especie de encaje transparente por enfrente y que si mirabas detenidamente podrías ver esa hermosa vagina, mis dedos índice y medio comenzaron a frotar por encima de su bikini, la quería bien mojada, bien excitada antes de follarla, sólo escuchaba gemidos entre el beso que nos dábamos nuevamente. Se detuvo abruptamente. Antes de poder preguntar que ocurría me susurró al oído “quiero ser yo quien te pruebe esta vez”.
Bajó hasta mi pene, me quitó los boxers y comenzó por frotar con su mano desde la base hasta la cabeza.
-Sin duda no está nada mal, ¿quién iba a decir que tenías todo esto? Y mas aún ¿quien iba a decir que todo esto me iba a llenar de placer?
No me dio tiempo a decir algo, pues ya había metido la cabeza y parte del tronco en su boca, hizo un movimiento doble, con su mano lo frotaba mientras lo recorría con su boca de igual manera. Si soy honesto, las mamadas nunca fueron algo con lo que sintiera un gran placer, quizás porqué cuando las había recibido de mi ex novia no sabía mucho sobre eso, o porqué era mucha mas mi excitacion de ...
... penetrar, pero algo ese día fue diferente, quizás era esa mirada suya hacía mí mientras lo hacía, tan sensual, como dejando claro que estaba disfrutando de comerse mi pene, quizás es que era mi hermana y ese morbo lo aumentaba de manera inmensa, no sé lo que era, pero me encantaba, por un instante dejé de pensar en penetrarla y sólo quedarme ahí mientras recibía la mamada de mi vida, y dada por mi hermana mayor. Dejó el movimiento con la mano para meter aun mas mi pene, notaba lo profundo que llegaba, hasta su garganta, y ella ni se inmutaba, no había gestos de asco, no había arcadas, sin duda sabía como hacerlo.
-Quiero que termines, quiero probarlo.- Me dijo.
Fue mas rápida, fue mas fuerte el como lo hacía, con su lengua jugueteaba un poco en la punta.
-Estoy a punto…- apenas y pude decir, fue mas rápida y no me contuve, su boca y parte de su cara terminaron regadas con mi semen.
-Que rico, mi amor.- soltó luego de haber comido lo que deposité en su boca.- Quiero mas, quiero todo de ti, de este pene que ahora sólo va a ser para mí.- sus palabras me excitaban profundamente, esa especie de dominación, de dar por hecho que ahora le pertenecía me gustaba como no tienen idea. Yo quería ser suyo, llevarla a lo mas alto de placer si eso quería y que me dejara mas que satisfecho a mí también.
Era hora de que la follara, después de tan delicioso acto, sentía que la forma de concluir ese momento era hacerla mía nuevamente, sin embargo sólo se levantó y comenzó a ...