1. Samantha: Corrupción y perversión de una casada (lll) (2/2)


    Fecha: 22/01/2025, Categorías: Sexo con Maduras Autor: JCerva, Fuente: CuentoRelatos

    ... visto bueno sobre cómo le quedaba. Aunque había algo que no le agradaba del todo.
    
    -Se te ves precioso, mi amor. Pero date una vuelta para verte mejor- Samantha haciéndole caso, comenzó a darse una vuelta lenta mientras agachaba la mirada aun con algo de pena. -Espérate ahí- la señora deteniendo la vuelta, se acercó a la casada que se encontraba dándole la espalda.
    
    Sin avisarle, con sus manos desabrocho el brasier y se lo quito antes de que pudiera reaccionar Samantha. Sintiéndose desnuda por aquella acción, llevando sus manos a sus melones que aún permanecían adentro del vestido mientras que volteaba su rostro completamente colorado para cuestionarle tal acción.
    
    -Pero porque hizo eso?- Samantha girando completamente su cuerpo hacia la señora le preguntaba pero no en un tono molesto, sino más bien con una mueca burlona.
    
    -Ay mija, se te veía horrible el brasier así todo salido. Este tipo de vestidos todos destapados es para que tengas a las niñas libre- sin ningún tipo de pudor, la señora se tomaba sus aguados pechos. -A ver, quítate las manos para ver cómo se te ve- pareciendo una orden, la señora le decía.
    
    Samantha concordaba con Doña Carmen en eso de que el brasier de plano no le iba con el diseño del vestido. Pero por su cabeza no había cruzado la idea de quitárselo. Aunque girando su mirada hacia atrás, podía ver en el reflejo del espejo lo bien que se veía su espalda desnuda ya sin el brasier. Haciéndole caso a la mujer, lentamente fue bajando sus manos ...
    ... hasta que dejo visible la parte superior del vestido. Grande fue la sorpresa de la señora al ver lo perfecto que se veía. Pareciera como si la casada llevara un brasier invisible ya que sus pechos se mantenían completamente erguidos. Incluso le parecía a la señora que el haberlos liberado de su prisión los había vuelto más grandes. El ver aquellos enormes globos de carnes mantenerse estoicos era como una burla para la gravedad que no tenía ningún efecto en ellos.
    
    -Mírate en el espejo y dime si te gusta cómo te ves o no- la señora mirando que en todo ese momento la casada tenía su mirada hacia un lado, le pidió que ahora fuera ella la que viera lo bien que se le veía el vestido.
    
    Samantha sin responder de nueva cuenta giro para mirarse en el espejo y al igual que Doña Carmen quedo fascinada por la vista que tenia de su propio cuerpo. Una sonrisa de orgullo inundaba su rostro mientras una de sus manos de posaba a un lado de uno de sus pechos.
    
    -Entonces si te gusto, ¿verdad?- Doña Carmen sacándola de sus pensamientos le pedía una respuesta aunque por su rostro de felicidad ya lo tenía claro.
    
    -Si…- fue la respuesta en susurro que dio la mujer mientras volteaba su mirada hacia la señora.
    
    -Pues no se diga más. Ese vestido te llevaras hoy. Aunque también deberías ponerte una tanga o algún calzón más chiquito porque esa carpa de circo que llevas puesta se te marca toda. También date una manita de gato, mi vida. Píntate mejor, así como el día que fuiste mi local. Y por ...